Para compensar el mal sabor de boca que nos ha dejado haber fustigado un poquito a las Asociaciones de Víctimas del Terrorismo, vamos a dar un repaso a los homenajes monumentales mas significativos dedicados a los caídos a manos de esa desalmada subespecie de asesinos tan proclive a llevarse por delante inocentes. Compilamos información muy fragmentaria, poco documentado está este asunto, así que es previsible que nos merezcamos alguna enmienda. No solo serán bienvenidas sino que están expresamente invitados a colaborar.
Uno de los primeros monumentos erigidos para recordar a víctimas de Eta fue el "Monumento a los Niños" inaugurado en 1991 en la Plaza de la Esperanza de Zaragoza, una obra de Carlos Pérez de Albéniz emplazada en el solar donde se ubicaba la casa cuartel de la Guardia Civil en la que a finales de 1987 la organización terrorista asesinó a 5 niños, 2 mujeres y 4 miembros de la Benemérita. Los autores fueron cuatro ciudadanos franceses, entre ellos el tristemente célebre Henry Parot y su hermano quienes recibieron las órdenes del huido de la Justicia Josu Ternera (volatilizado tras su precipitada puesta en libertad por nuestro Supremo que cuando rectificó ya no lo encontró). El mismo a quien los nacionalistas "supuestamente civilizados" hicieron miembro de la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento de Vasco cuando fue diputado de Euskal Herritarrok a finales de los noventa. Eso eran humillaciones y no las de Estrasburgo. Además, no pocos de los perpetradores de aquella afrenta ahí siguen cobrando de nosotros y de vd.
A mas, a mas, los gestores de la capital catalana no derrocharon sentimientos en sus decisiones sobre el conmemorativo monumento. Cierto es que escogieron a un artista de fama internacional, Solomon "Sol" LeWitt (1928-2007), pero la obra seleccionada en absoluto fue concebida exprofeso sino que fue una pieza mas de la serie acogida a la denominación "Progresión Irregular", en este caso la titulada "Tall Irregular Progression", así en caso de que se hable una nada de inglés queda claro que con sus 12 m. es la mas alta de esa colección. También se ve el imbatible (Trías dixit) cosmopolitismo de BCN en ese título que ni siquiera fue adaptado a la finalidad establecida, quizá por ello se recurrió a un idiomático "ni tuya-ni mía" precediendo en esto a casos tan emblemáticos como el de la antigua Feria de Bilbao que ahora oficialmente es el Bilbao Exhibiton Centre o al fuertemente subvencionado chiriguito donostiarra de los cocineros de postín bautizado Basque Culinary Center (ya se ve que ni en la forma de escribir centro en inglés se ponen de acuerdo gipuchis y vizcaínos, los primeros siguen a los americanos y los segundos a los inspiradores de la ikurriña). El caso es que resulta patente la nula inspiración en las víctimas, salvo que aceptemos que a Don "Sol" todas las emociones le sugerían similares aglomeraciones de prismas que, en este caso, bien podían haber sido 21. Pues tampoco. Difícil concebir un homenaje con menos alma, puro prêt-à-porter conmemorativo que invita a filosofar en vía métrica y preguntarse qué es un monumento. No es raro que sea un perfecto desconocido en la muy turística Barcelona.
Cataluña aun vivió en 1991 una tercera masacre de iniciativa etarra en la casa cuartel de Vic. Allí fueron asesinadas 10 personas, 4 de ellas niños, algo que parece que fue demasiado para la sensibilidad de Carod-Rovira que escribió una famosa carta en Avui en la que reprochaba a la banda que no hubiera atendido la petición que les había formulado personalmente "en algún lugar de Euzkadi" de no atentar en "su país". Años después sería mas puntilloso en la formalización de acuerdos con la banda. Hasta donde sabemos sigue pendiente de ejecución el acuerdo municipal de instalar algún símbolo conmemorativo en el lugar que ocupó la dependencia de la Guarda Civil. Esto es la Cataluña profunda.
Saltamos a Madrid para constatar que tampoco la capital de España anduvo muy fina en esto porque el monumento al reguero de víctimas que Eta empezó a dejar en Madrid ya en 1974 es posterior al dedicado a las del 11-M (de 2004, recordemos) en la Estación de Atocha que fue inaugurado con bastante pompa por los Reyes en marzo de 2007. No contó con tan ilustre presencia la presentación del homenaje a los caídos por obra del terrorismo autóctono. Este tuvo que salir adelante mucho mas lentamente financiado por una suscripción popular promovida por la Fundación DENAES. La resultante composición de bronce del artista Pedro Requejo fue inaugurada en mayo de 2008 en la Plaza de la República Dominicana, el lugar donde Eta asesinó en julio de 1986 a 12 guardias civiles.
Queda así claro que el tributo madrileño fue aún bastante mas lento que el barcelonés, puesto que la primera masacre de Eta data como decíamos de 1974, año en el que se detonó una bomba en la Cafetería Rolando de la Calle del Correo muy frecuentada por policías de la cercana Dirección General de Seguridad, aunque solo uno de los trece muertos formaba parte del teórico objetivo. Un balance premonitorio de la cantidad de inocentes que iban a resultar asesinados por esos bestias.
Un caso curioso es el de Agustín Ibarrola, el artista al que su inequívoco rechazo del terrorismo, tan poco habitual por otra parte en ese gremio vasco en los momentos duros, ahora es otra cosa, ha especializado en la elaboración de monumentos a las víctimas. Suyos son el erigido en Ermua en 2002 y el inaugurado en el vitoriano Portal de Foronda al año siguiente, el primero que hizo una referencia individualizada a las víctimas por medio de mas de novecientas placas que recubren un montículo que se contrapone a una doble pieza metálica de 15 metros de altura que si hubiera sido de piedra nos habríamos aventurado a denominar bilito. Inevitablemente, pronto quedó severamente desactualizado. No cabe duda de que hubo un exceso de optimismo en el concepto aplicado.
Arriba a la izda. monumento de Ermua. El resto de fotos pertenecen al de Vitoria. Las estrellas como la que sostiene Ibarrola son el símbolo de su promotora COVITE (Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco) |
Es nuestro epónimo Oviedo la otra ciudad que se ha atrevido con los engorros propios de un monumento que registra los nombres de las víctimas, una lista que no está exenta de polémicas. La reseña de prensa de su inauguración en mayo de 2007 con manifiesta ausencia de los representantes locales del entonces socialista Gobierno Central cifra en unos improbables, por lo redondo de la cifra, 1.300 los nombres inscritos en las paneles de mármol negro que se adornan con la blanca "Mano de Fátima" del artista Jose Luis Sánchez. Bastante poco lucido para los casi 200.000 euros que parece que costó. Y es que esta benemérita capital (a mas de invicta, heroica, buena, muy noble y muy leal) desde la que les escribimos es, con permiso de Eduardo Mendoza, otra "ciudad de los prodigios", al menos con los dineros públicos.
En cuanto nos adjudiquen la primera subvención, que alguna de las mucha existentes acabaremos por merecernos, mandaremos un becario a contar los nombres inscritos en la pieza situada en la poco concurrida plaza dedicada al poeta Ángel González. Lo que podemos confirmarles por ahora es que la lista se inicia con Melitón Manzanas y finaliza con los dos asesinados por la bomba colocada en la T4 madrileña el 30/12/2006, de lo que se deduce que ya faltan 10 nombres. Ya decíamos que este es un concepto monumental con un trabajoso mantenimiento que esperemos haya dejado de serlo. Muestre fe en ello y haga un último esfuerzo de puesta al día, Alcalde.
Como en este blog Oviedo tiene enchufe, vamos a dejárselo como sabor de boca. Otro granito para el granero promocional, así que posponemos hasta un futuro apunte el necesario regreso a Vitoria, donde nos pasaremos por su parlamento, les enseñaremos mas obras del especialista Ibarrola y completaremos la entrada con algunos otros homenajes adicionales.
Mas artículos para hablar de las victimas ... hay que aburrir con el tema, como hacen otros que nos aburren todos los días hablandonos de temas tan trascendentes como sus ombligos
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