Como introducción al repaso que hoy nos proponemos dar al tratamiento dado por el humor gráfico a la "moda" de atacar obras de arte, vamos a comenzar por recordar el sufrido, hace ya más de un siglo, por 'La Venus del espejo'. Y es que en marzo de 1914 el cuadro de Velázquez fue rasgado siete veces con un cuchillo por la sufragista Mary Richardson en protesta por la detención de su compañera de activismo Emily Pankhurst. En una entrevista concedida en 1952 aclararía que el motivo de la elección de ese objetivo fue que «no le gustaba la manera en que los visitantes masculinos la miraban boquiabiertos todo el día». Nos traemos desde el CLIPDA C: La Venus del espejo (I) algunas imágenes de las reseñas periodística de aquel atentado contra el cuadro que la National Gallery de Londres exhibe con el título 'The Rokeby Venus' por el nombre del palacete donde fue colgada por su primer propietario inglés, que la adquirió en 1816 tras ser robada de Madrid por el ejército británico durante la Guerra de Independencia.
Una viñeta publicada poco después en la revista satírica Punch hacía una relectura del asalto en clave política. Bernard Partridge hacía referencia en la misma al conflicto de Irlanda por medio de una imagen en la que el representante de la revista Mr. Punch trata de disuadir al líder conservador Bonar Law de su intención de atacar el cuadro que ejerce en el dibujo de referencia a la independencia de Irlanda (que se formalizaría en 1922). El político irlandés John Redmond es quien interpreta el papel de Cupido.
El citado incidente inspiró algunas otras aplicaciones humorísticas del "pegado", ya sin obras de arte como objetivo, como es el caso de las adjuntas viñetas de Christian Adams (Evening Standard, 5/7) y Guy Venables (Metro, 7/7) sobre la resistencia de Boris Johnson a dimitir pese a las presiones que acabarían por forzarle a ceder el liderazgo del Partido Conservador.
El dibujante australiano Mark Knight daba cuenta la semana pasada de que el pasado domingo dos activistas climáticos de Extinction Rebellion pegaron sus manos al cuadro 'Masacre en Corea' (1951) de Pablo Picasso, propiedad del Museo Picasso de París, que estaba expuesto en un museo de Melbourne (más detalles).
Vamos ya con el último ataque, que ha sido el perpetrado el viernes en la National Gallery de Londres por dos miembres de la organización Just Stop Oil contra la versión de 'Los Girasoles' de Van Gogh que forma parte de la colección de ese museo. Pocas horas después Ferran Martín era el primer dibujante a quien veíamos, vía Twitter, hacerse eco del lanzamiento de un bote de sopa de tomate.
En la prensa nacional del sábado vimos tratado el incidente por Idígoras y Pachi (El Mundo), Miki y Duarte (grupo Joly), Javi Salado (grupo Promecal) y Tomás Serrano (El Español), pero este con una mera evocación en una pieza, ya comentada en el recopilatorio de ayer, dedicada a la última bofetada diplomática de Marruecos.
Volvemos a la prensa española para finalizar dando cuenta de los dibujos publicados ayer sobre este ataque: Kiko da Silva (El Correo Gallego), que coincidió con Javi Salado en meter de por medio la conocida aversión de Mafalda por la sopa, Asier y Javier (Deia), Idígoras (sur) y Flavita Banana (El País).
Adenda: la visión de Coco en Libération 18/10 (¿Qué ecologista eres?: ansioso, furioso, avergonzado o feliz) y en Charlie Hebdo (con = imbécil), más la de Guy Venables en el diario Metro del día 19.
No hay comentarios:
Publicar un comentario