Humor olímpico (II)

 

En el resumen semanal del pasado domingo ya dimos cuenta de que Asier y Javier confirmaron el miércoles 28 el pronóstico que hacíamos en Humor olímpico (I) y celebraron con una caricatura la medalla de Maialen Chourraut. Hoy añadimos el homenaje de Santy Gutiérrez que requiere esforzarse más para reconocer en esa caricatura a la brava kayakista y madre guipuzcoana.

Pero la atención del humor olímpico pronto se centró en la renuncia a la competición de Simone Biles. Hasta la foto elegida por El Mundo en su portada del 29/7/21 compitió con las secciones de Ricardo y Gallego y Rey. Otros dibujantes nacionales que se ocuparon de la gimnasta fueron Pinto & Chinto (La Voz de Galicia) y JJ Aós (Diario de Noticias), este con una comparativa particularmente oportuna. 

Entre las viñetas foráneas dedicadas a  Biles nos parece particularmente destacable la de Matt Davies. Un dibujo que mostramos seguido de la visión de Manel Fontdevila sobre las tensas polémicas que suscitaron los psicológicos motivos de la retirada. Tiempos son estos en que se encasquetan lecciones de moralina en cada esquina. Bill Bramhall aporta una visión estadounidense sobre eso.

Otros ejemplos de humor con protagonistas "potato couch" son los de Gary McCoy, una pieza no demasiado amable con Biles, y Dave Whamond, este con otra muestra de un "experto" forjado frente al televisor.

Una fértil categoría del humor olímpico es la que utiliza la competición como base de viñetas políticas. De lo que hemos visto en la prensa británica, nos han parecido particularmente destacables las escenas deportivas ideadas por Patrick Blower (con el premier Boris Johnson, los líderes de la oposición y nacionalismo escocés, más el ministro de Hacienda) y Peter Brookes (este sobre el rechazo policial a las medidas planteadas por la ministra del Interior).

Christian Adams inspira hoy en la jovencísima skater Sky Brown, medalla de bronce con tan solo 13 años, su crítica de los semafóricos vaivenes que vive el país. Y si de vela se trata, Johnson ha sido visto practicándo ese deporte tanto en el humor del propio Adams como en el de Dave Brown.

En cuanto al humor español, el domingo ya dábamos cuenta de la gimnástica versión de Manel Fontdevila de la metáfora de la patata caliente y, pese a no ser deporte olímpico, también nos traemos la lucha canaria de Padylla con una minimalista carícatura del presidente insular Ángel Víctor Torres.

La lucha también fue uno de los deportes escogidos por Davila para su serie olímpica. Un deporte que decidió aplicar al hispano grandonismo de taberna. El dibujante de Faro de Vigo asimismo tuvo un recuerdo para David Cal, que es el deportista español con más medallas olímpicas (cinco entre Atenas, Beijing y Londres).

Santy Gutiérrez dedicó el lunes una viñeta a la gallega Ana Peleteiro, mientras que Ray Zapata ocupó la que Ángel Idígoras  aprovechó para comentar una cuestión de política local malagueña. Ya formando dúo, ambos medallistas comparecieron en los dibujos de Padylla y Ferrán Martín.

Puestos a buscar espectadores para esa televisión, hay que ver lo despistadillo que estuvo Ferran Martín de no acordarse de un tal Garriga. Pero hay que seguir trabajándose los clichés del odio en este enconadísimo país que nos está quedando.

Al margen de alguno de esos irrelevantes imbéciles que nunca faltan, las supuestas reacciones racistas a la medalla de Peleterio fueron meros constructos creados por los agitadores de turno (incluida una falsísima manipulación de Podemos). Cierto que alentados, en parte, por el nada oportuno exorcismo de algunos demonios interiores de la atleta gallega (unas manifestaciones sobre las que resulta muy cuestionable que fueran muchos, como pretende, los jodidos; cuestión distinta es que esa torpeza haya enfriado no pocas apreciativas valoraciones previas). En todo caso, fue la primera olímpica que se benefició de la vacacional reincorporación de Sciammarella, que le dedicó el martes un homenaje que, ya puestos, también habría servido para Simone Biles (quien también parece poseída por algunos alucinatorios demonios; ¿de verdad creerá que, no ya todo el mundo, sino una parte mínimamente significativa del público reza por su caída?).

La tira de Fontdevila de esa misma jornada es toda una invitación a reflexionar sobre cómo está prevaleciendo lo extradeportivo en las valoraciones de cuanto ocurre en esta Olimpiada. Puro signo de tan  crispados tiempos. Debajo añadimos el homenaje de Marselle al mallorquín Joan Cardona, medallista en clase Finn.

Sciammarella llevó ayer a su sección de El País a Teresa Portela que, ¡por fin!, con 39 años ha conseguido una medalla en la ha sido su sexta participación olímpica. Unir a esa carrera deportiva ser madre de una hija de 7, ¡eso sí que es conciliar!, no le ha dado para merecer, hasta el momento, un tuit de la ministra de Igualdad (que el lunes se marcó un hilo para disimular un poco su olímpica apatía previa, solo rota para apoyar a Biles; Juan Claudio Ramón trataba ayer en El Mundo sobre "el vulgar deseo de vampirizar el infortunio ajeno para presumir de buenos sentimientos propios"). Habrá que esperar a que la CM del ministerio prepare el próximo hilo. 

El gallego Santy Gutiérrez buscó una forma de homenaje a la palista del Morrazo que, al igual que en el caso de Peleteiro, le excusara de tener que caricaturizar. Y similar "truco" aplicó Gogue en Faro de Vigo (Davila andaba con golf), mientras Puebla dedicaba su tira de Abc a la despedida de Pau Gasol de la selección.

El fracaso de la haltera transexual neozelandesa Laurel Hubbard ha evitado la proliferación de las polémicas sobre la espinosa cuestión de los deportistas trans. Un asunto que Napi se llevó a un disciplina en la que, de momento, es sumamente improbable pueda tener relevante incidencia.

El letón Gatis Sluka aporta una vinculada visión sobre la proliferación de toda una diversidad de controles.

Otra interesante polémica que vimos tratada hace algunos días en una viñeta de Steve Sack es la relativa al rechazo de alguna competidoras a la indumentaria reglamentaria de algunos deportes, particularmente la del volley playa. Excelente propuesta.

Hoy es el dibujante belga Dubus quien suma otra pieza sobre esa cuestión desde el diario La Libre: ¡Pero llevan pantalones! / ¡Qué horror! ¡Eso significa que nos veremos obligados a ver un partido!

Hoy nos ha llamado la atención que, existiendo unos cuantos homenajeables medallistas recientes, Sciammarella retroceda en el calendario olímpico para llevar a Maialen Chourraut a su sección de El País.  Exclusivamente femenina parece pretenderla en olímpica materia, pero sus plásticas no parecen precisamente un incentivo a la incorporación de más mujeres al deporte de alto nivel.

Y del escaso humor olímpico que hoy incluye la prensa, hemos optado por traernos, ya para finalizar, la visión de Álvaro sobre la maratón. 

P.S.- Javi Salado ha sido el primero en dedicar una viñeta al oro de Sandra Sánchez. Lo ha hecho sacando partido del dibujo que le dedicó en Tribuna de Toledo el 12 de noviembre de 2018 con motivo de la consecución del Campeonato del Mundo de katas.