Los nombres de la India publicado por Francisco Ríos Álvarez en La Voz de Galicia es nuestra primera recomendación de hoy a la vista de que, con un inquietante nacionalismo de por medio, parece que viene con fuerza Bharat. Y metidos en las implicaciones de la diversidad de nombres que puedan utilizarse para designar una misma realidad, qué decir de la ocurrencia del PNV de pedir que se llame a la amnistía de otra manera para que no sea «un tótem insalvable» [imaginamos que quisiera decir tabú]. Así desprecian algunos políticos la inteligencia del ciudadano medio. Y lo peor es que tienen buenas razones para ello.
Oportuno momento para recordar un fragmento del reciente artículo ¿Constructivismo jurídico? (El Mundo, 20/9/23) de Manuel Aragón, magistrado emérito del Tribunal Constitucional:
Como es sabido, en Derecho las cosas son lo que son y no como se las denomine. De manera que, si la medida, no llamándose amnistía, tuviese todas las características de una amnistía, algo que conceptualmente es claro en sentido jurídico, la inconstitucionalidad de esa medida seguiría siendo patente.
La peculiar conexión conceptual que establece la viñeta de Caín en La Razón del jueves nos invita a continuar con Álex Grijelmo que comenta en La punta de la lengua titulada “En tetas” la creciente pujanza de esa alternativa popular, que recuerda haber escuchado por vez primera vez en 1998, al anglicismo ‘top-less’. Al igual que en otras ocasiones, adjuntamos como Anexo el texto del artículo que está protegido por la barrera de pago de la web del diario madrileño. Lo complementamos con una viñeta de Sansón que pone oportuna ilustración.
Pasamos al Centro Virtual Cervantes de la mano de Fernando A. Navarro, autor del interesante Trujamán Se parecen, se parecen..., pero no son lo mismo (18): paste, cream y ointment. La colaterales consultas que nos ha suscitado invitan a llamar la atención de la Real Academia sobre la necesidad de actualizar la 2ª acepción de ungüento (que data de 1925): Medicamento que se aplica al exterior, compuesto de diversas sustancias, entre las cuales figuran la cera amarilla, el aceite de oliva y el sebo de carnero.
En la sección Rinconete hemos leído el artículo de Elena Santos ¿Ficción o documento? Baroni: un viaje, de Sergio Chejfec sobre el escritor argentino fallecido a los 65 años en abril de 2022. Un dato biográfico que entendemos ayuda a enmarcar el libro comentado es que vivió década y media en Venezuela.
De lo publicado en Fundéu nos parece destacable la presentación de la bastante lampedusiana expresión fenómeno anómalo no identificado (FANI) cuya sigla inglesa UAP (unidentified anomalous phenomenon) desaconsejan utilizar, del mismo modo que ovni es preferible a UFO.
Le vemos a esa FANI, de puro inespecífica, un considerable potencial metafórico, porque nos parece aplicable a fenómenos tan anómalos como escuchar a Yolanda Díaz el sintagma "jóvenes climáticos". Qué tiempos estos en que cada vez resulta más difícil distinguir los lapsus de las necedades guionizadas.
En el apunte del jueves recopilamos una extensa colección de viñetas sobre el multilingüe pleno del Congreso de la víspera. Hoy vamos a recordar las idiomáticas ironías de Idígoras y Pachi sobre el malagueño y de Miki y Duarte sobre el "rajoyés", así como la de Sansón sobre el spanglish con una aplicación a Santiago Abascal que vemos forzada por cuanto no resulta un rasgo que precisamente destaque en el lenguaje del líder de Vox.
En la comparación de referencias corporales alusivas a elevados precios utilizadas en español, inglés y francés realizada en La lengua en la semana 22/2022 ya apuntábamos, al comentar una viñeta del argelino Le Hic, la preponderancia de la expresión "coûter un bras" (costar un brazo) respecto a "coûter une jambe" (pierna). Así es que nos preguntábamos si la utilización combinada, a imagen del inglés, realizada el 25/1/23 por Ygreck en Journal de Montreal no sería una especificidad lingüística de Québec que, como puede verse, se complementaba con la referencia meramente verbal al riñón ("va a hacer falta vender un riñón") que tenemos por poco utilizada en francés, así que nos ha despistado la elección de Gros. Y nos ha venido a la memoria el forgiano personaje que volvía de vender las asaduras (concepto que, por cierto, no incluye los riñones) en la viñeta publicada en El País el 26/4/13.
Anexo:
“En tetas”
El genio del idioma ha aportado una certera alternativa popular al anglicismo ‘top-less’, y empieza a usarse en público
por Álex Grijelmo
Eva Amaral habló el 11 de septiembre en Hora 25, de la Cadena SER, sobre su decisión de cantar con el pecho desnudo ante 23.000 personas en el festival Sonorama, el 13 de agosto en Aranda de Duero (Burgos). Al responder a una pregunta de Aimar Bretos, contó que cuando era adolescente ya había oído recriminaciones por tomar el sol “en tetas”.
Recordé enseguida que había anotado esa locución por vez primera en 1998, cuando en una playa le oí decir a una bañista “voy a tomar el sol en tetas”, alternativa novedosa al entonces más extendido “voy a tomar el sol en top-less” (o sea, “sin lo de arriba”); o también “voy a hacer top-less”. Usé la anécdota en el libro Defensa apasionada del idioma español, de ese mismo año, como ejemplo de las alternativas que el genio del idioma —el ser imaginario que gobierna una lengua— suele ofrecer frente a los anglicismos cuando le damos un tiempo para que se le ocurra algo (es lento el genio).
Éste en concreto se incorporó al Diccionario en 2021, con las grafías topless y top-less, ambas en cursiva; y con dos acepciones: “Bar o local donde trabajan mujeres desnudas de cintura para arriba” y “modo de vestir femenino que deja los pechos al aire”. (Bueno, más que un modo de vestirse, es un modo de desvestirse). Ahora las academias recogen ya la escritura españolizada y en redonda: “toples”; vocablo que, visto así, bien podría leerse separado en las sílabas to y ples; igual que so y ples en “soples”, por ejemplo. La definición se ha modificado también: “Desnudo femenino de cintura para arriba”.
Volví a anotar ese uso de “en tetas” tras oírlo en la serie Cuéntame (TVE, capítulo 243, en marzo de 2013), cuando un niño exclama que Lola, una prima inglesa de los Alcántara, “se ha puesto en tetas”. Y en 2018 la usaba ya la escritora Marta Sanz en su libro Monstruas y centauras: “Yo en los ochenta tomé el sol en tetas”.
Aquí mismo le dediqué unas líneas al asunto en marzo de 2019 (El ‘top ten’, el ‘top manta’ o el ‘top-less’) y señalaba que Google ofrecía 3.290.000 resultados de “en tetas”. Le he preguntado ahora al buscador y refleja ya 3.510.000 registros (220.000 más). Por su parte, el cruce de “en tetas” y “Amaral” proporciona 2.490 usos. Por ejemplo: “Amaral, en tetas” (pie de foto en Superdeporte). “Cantar en tetas sobre un escenario cumple todos los requisitos para que lluevan los elogios y las críticas por todas partes” (Mariola Riera, La Nueva España, de Oviedo). “Las nuevas doctrinas de la corrección política dictan que Eva tiene derecho a quedarse en tetas” (Vidal Arranz, Voxpópuli); “Es condición sine quanum [sic] que los cuerpos dejen de ser un objeto de sexualización ‘que impida que podamos quedarnos en tetas en un concierto” (entrevista a la artista Diana Montero en la revista Vogue). El banco de datos del español actual (Corpes), de la Real Academia, entrega 19 usos escritos de esta locución en libros (la mayoría) y en prensa; entre ellos, 10 de España y 6 de Argentina, país donde se data el más antiguo (diario Página 12, 2001).
En definitiva, el genio del idioma ha aportado una certera alternativa popular al anglicismo top-less, y empieza a usarse en público. Todo ello nos lleva a plantearnos si “en tetas” debiera añadirse como locución en la entrada “tetas” del Diccionario, tal vez con las marcas de “coloquial” y “españolismo”.
Una declaración de Jeanette en Abc el 17 de agosto vendría en apoyo de esa propuesta, y la aporto como cita de autoridad. La intérprete de Soy rebelde y Porque te vas (así es el título, aunque ella pronuncie “por qué te vas”), nacida en Londres y residente en España desde los años sesenta, evitó en la entrevista el término top-less, que sin duda conoce y habrá usado en su lengua materna, para decir en español con toda claridad: “Yo ya iba en tetas por la playa antes de que naciera Amaral”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario