Terminábamos en el año 2014 la anterior entrada dedicada a los retoques que con tanta asiduidad realiza en sus portadas la edición mexicana de Playboy. Nos saltamos el en este sentido poco noticioso 2013 para comenzar esta continuación con el número de noviembre de 2012. En el mismo nuevamente es el siempre socorrido pelo el que es oportunamente incrementado para hacer la portada aceptable a los usos locales. Pero si son realmente observadores verán que, en realidad, también se produce un quirúrgico desplazamiento del pezón derecho de Marisol Santacruz. Menos mal que los de este tipo tardan poco en curar.
En agosto de ese mismo año había sido un estiramiento de la camiseta de la boxeadora Mariana Juárez, mas conocida como la “Barbie”, el que había hecho apto el "underboob" de la imagen escogida para la cubierta.
Claro que este ejercicio ya lo tenían practicado porque ya lo habían realizado en marzo de 2007 sobre la camiseta de Michelle Manhart.
En marzo de 2012 también fueron unos cabellos los que permitieron tapar el inmostrable pezón de Jackeline Arroyo.
Saltamos hasta octubre de 2011 para ver un caso bastante trabajado porque, como pueden ver a continuación, el fondo de la imagen de Celia Lora fue modificado de forma bastante radical a la par que también se procedía a colocar un nuevo mechón de pelo sobre otro inoportuno pezón.
Quizá tenga algún interés aclarar que las anteriores no son fotos dedicadas como invitan a pensar esas firmas que aparecen sobre el muslo. Lo que ocurre es que esta mexicana cuenta entre sus numerosos tatuajes con ese bien visible que reproduce la firma de Ricky Martin.
Lo de junio sí que fue cosa mas seria porque ya estamos hablando de una mutilación. Vean el espeluznante arrancamiento de pezón a que fue sometida Gaby Ramírez en su atractiva interpretación del papel de Wonder Woman. Esto sí que debería estar prohibido.
Finalizamos el recorrido por las tapas del año 2011, y también de este post, con el número de marzo en el cual el bikini de Lorena Herrera fue sometido al añadido de una pieza que rompe ostensiblemente la simetría radial del diseño.
Adenda 15/7/16: No está Playboy solo en este asunto de las manipulaciones censoras. Vean lo que ocurrió con Aylin Mújica en la portada de la revista H extremo de enero de 2010.
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