lunes, 4 de mayo de 2015

Cuando la inspiración procede del arte LI: triple autorretrato (1ª parte)



Vamos a cerrar el repaso de los homenajes (y algunos que no son tales) de la obra de Norman Rockwell con el llamado "Triple autorretrato" que fue portada del Saturday Evening Post del 13 de febrero de 1960, un número en el que se publicaban las primeras páginas de la autobiografía del artista. Cabe destacar que era la segunda vez que esa revista publicaba un autorretrato, y nuevamente de espalda, de su gran portadista, puesto que en octubre de 1938 la cubierta había sido el cuadro titulado "Lienzo en blanco". Lo mostramos emparejado con el homenaje protagonizado por el pato Donald obra de Tony Fernández, un colaborador español de Disney.

 

El uso de un espejo para la realización de autorretratos ya aparece narrado por Plinio el Viejo en su Naturalis Historia (77 d. C.), obra en la que da cuenta de la utilización del procedimiento, en el siglo I a. C., por Iaia de Cízico, una de las seis mujeres artistas de la antigüedad mencionadas por el escritor romano: “Iaia de Cízico, virgen toda su vida, trabajó en Roma durante su juventud en tiempos de Varro [Marco Terencio Varrón], pintó cuadros a pincel y grabó figuras de marfil, la mayoría retratos de mujeres y la imagen de una anciana de Nápoles en un gran cuadro, también hizo su propio retrato con un espejo”.

Giovanni Boccaccio recuperó esa historia en ‘De claris mulieribus’ (‘Acerca de las mujeres ilustres’), una colección de biografías de mujeres históricas y míticas escrita entre 1361 y 1362 en la que cambió el nombre de Iaia por el de Marcia. Reproducimos un fragmento de primera versión traducida al castellano, impresa en Zaragoza en 1494: “De Marcia, fija de Varrón, virgen romana, la qual, allende desta maravillosa abstinencia de la carne, alcançó una excellente alabança en pintar, ca dízese haver sobrado a los más sobidos pintores de su tiempo […] Hovo della en aquella arte grandes y insignes cosas, y entre las otras su misma ymagen, la qual ella mirándose en un spejo tan enteramente sacó, pusiendo todos los tercios, líneas y colores y torno de cara en una tabla que quantos en su tiempo vieron la figura conocieron ser ella, y ninguno la tomó por otra

Y es en las ediciones de esa obra donde se encuentra las primeras representaciones gráficas del concepto del triple autorretrato (enlace a una colección). La más antigua, con las reservas que cabe mantener sobre las dataciones de las diferentes ediciones, sería la de realizada en 1403 por un artista anónimo para una traducción al francés que se conserva en la Biblioteca Nacional de Francia (fichaenlace a la versión digital).


Saltamos casi tres siglos para ver el concepto, además por duplicado, en la obra del pintor austriaco Johannes Gumpp Roberto (1626 – 1728).

Autorretratos (1646) de Johannes Gumpp, el circular en los Uffizi de Florencia y el rectangular en una colección privada

La idea también sedujo a otros artistas como Honoré Daumier que la utilizó en una litografía fechada en 1848. El uso como portada realizado con la versión de Rockwell tampoco es novedoso, puesto que ya se había visto en 1938 en la alemana Simplicissimus de la mano del ilustrador Karl Arnold. Posteriormente Rea Irvin lo llevaría al semanario "The New Yorker" en la tapa fechada el 14 de abril de 1951. Eso ciñéndonos a las versiones con espejo, porque también caben aplicaciones recursivas como la que llevó Coles Philips a la portada de Life en agosto de 1909. Pero esa ya es otra línea creativa que tendremos que abordar en otro momento.

La popularidad de las portadas de Rockwell en el Post lanzó al estrellato su versión que se ha convertido en un cliché enormemente recreado. Añadamos que, según era habitual en el artista americano, utilizó como boceto fotografías de la composición como la que puede verse debajo.

 

Comenzamos el repaso de las recreaciones del triple autorretrato con la versión publicada el 26 de noviembre de 2007 por la prestigiosa Time, que tan solo introdujo la modificación de sustituir el retrato del lienzo por un mapa de Estados Unidos. A su lado hemos colocado una de nuestras favoritas, la realizada por Mark Stuzman para el número de 24 junio de 2010 de la revista Billboard. Una fantástica referencia al cambiante físico de Michael Jackson.

 

La revista del la institución Smithsonian también recurrió a este cliché en el número de octubre de 2013 de su revista, mientras que no podía faltar una versión de la revista MAD. La adjunta fue utilizada en la portada del libro conmemorativo del 50 aniversario de esa publicación titulado "Mad Art: A Visual Celebration of the Art of Mad Magazine and the Idiots Who Create It" (por Mark Evanier, 2002). Ya se ve que el resultado equivale al que resultaría de utilizar un espejo de los que, como hemos documentado en un pasado apunte de esta seriegustaba representar René Magritte.


Es en el mundo del comic donde los ejemplos son numerosísimos, por lo que es imposible pretender toda exhaustividad. Un primer ejemplo que nos gusta particularmente es el homenaje a su patrón creado por el ilustrador de la factoría Disney Charles Boyer. Pero la versión mas intensamente comercializada por esa compañía de entretenimiento es la recíproca que puede verse junto a estas líneas en versión figurita y debajo en la litografía que la inspira.



Para concluir esta primera parte del repaso de las reproducciones del "Triple autorretrato" vamos a recurrir a la versión protagonizada por el gato Garfield que el Post encargó a Jack Davis para su número de noviembre de 1984.





Adenda: Con motivo de las elecciones presidenciales de 2016 de Estados Unidos, Richard Turley creó para la revista Esquire una serie de falsas portadas de la desaparecida publicación Spy. Una de ellas, ilustrada por David Parkins, recreó el triple autorretrato.


George W. Bush a los pinceles en la portada de Kagan McLeod para el número de enero de 2018 de Literary Review of Canada.


Chris Riddell recreó en la portada de marzo 2021 de Literary Review la escena de la pintora Marcia [hija de Marco Terencio Varrón] entregada a la creación de un autorretrato con que una artista anónimo ilustró el ejemplar de la traducción al francés de la obra de Giovanni Boccaccio ‘De claris mulieribus’ fechada hacia 1403 que se conserva en la Biblioteca Nacional de Francia  (fichaenlace a la versión digital).

 



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