Lo que puede caernos encima (y II)

Dejábamos ayer al candidato Don Donald en pleno de divorcio de Ivanka, un proceso que fue espléndidamente reflejado en la portada del semanario New York, una revista que, como han podido ver, ha hecho un intenso seguimiento del personaje. De hecho, hasta algún yate de este millonario ha llevado a su portada (mas detalles sobre el Trump Princess de 85 m. de eslora en el siguiente enlace).

Al menos tuvieron el detalle de ilustrar la del divorcio con una espléndida recreación del pop de Roy Lichtenstein (una portada que ya le hemos enseñado en una pasada entrada dedicada a la obra de ese artista).

En 1994, ya casado con Marla Maples, el natalicio de su hija Tiffany fue portada de Vanity Fair en uno de los momentos de la historia de esa revista en que ha hecho mayor honor a su nombre. Encima se empeñaron en calzar un artículo sobre los valores de la familia Trump. Unos valores que tres años mas tarde se habían convertido en una discusión sobre el auténtico valor del fundamental y primigenio, el de la “idemnización” que correspondía recibir a Marla en un proceso de divorcio que reseñamos a través de la portada que le dedicó la revista People. La misma que años antes había llevado a su cubierta al ricacho con 5 millones de dólares en efectivo en sus brazos.

 

¿Todavía no les da miedo que pueda llegar a Presidente USA?, pues seguimos. 

Lo que no está del todo claro es cuando le entró la manía del dedo apuntador y el morrito en plan yuhuuu o quien sabe qué exclamación.

El caso es que ya hay constancia de esa pose en el número de agosto de 2004 de Esquire y a partir de ahí casi es una marca de la casa que ilustramos con otros ejemplos tomados de GQ (enero 2011) y Bloomberg Businessweek (mayo 2011).

Los que estuvieron realmente inspirados fueron los chicos de la satírica MAD cuando en abril de 2007 parodiaron el famoso cartel de "Lo que el viento se llevó" para ilustrar una hipotética reconciliación con la televisiva Rosie O´Donnell con quien tuvo un fuerte encontronazo después de que esta lo calificara de corrupto. Ya en 2011 esa misma revista lo incluyó convertido en "Birther King" en su selección "20 Dumbest People, Events & Things of the Year"(se dió el nombre de birthers a quienes proclamaban la inegibilidad de Obama como presidente poniendo en duda su lugar de nacimiento).

El que tampoco se ha cortado en sus críticas al empresario es el periódico neoyorquino Daily News que hace poco mas de un mes recibía la noticia de su candidatura presidencial disfrazándole de payaso. Un "juego" que, por cierto, ya había realizado en 2011 con motivo de la anterior intentona de Trump de convertirse en el candidato republicano.

También hay algún director de arte que se ha empeñado en presentarlo como un santo, como hizo el de Razor en 2004 para celebrar su "resurrección y ascensión". Añadimos con cierta desgana esta tapa a nuestra colección, pero lo cierto es que ya tenemos allí algunos elementos y elementas de cuidado.

No nos gusta esta imagen como final. Así que vamos a recurrir a otro miembro de la familia, en concreto a su hija Ivanka, para cerrar con mejor sabor de boca esta colección de portadas Trump. Así podrán comprobar como en esta acaudalada familia el negocio de la construcción se aprende desde abajo. Ahí tienen a la chiquilla picando y, ya después de cobrar la paguita, lista para ir de fiesta.

Una aclaración final. Si encuentran por ahí fotos subidas de tono de una chica que se sientan tentados a identificar como Ivanka, sepan que guarda cierto parecido con una modelo que responde al nombre de Shay Laren. Esta misma: