Angelina nos enseña algunos trucos de los editores

La actriz que tiene como segundo nombre la palabra con la que los franceses dicen guapa es probablemente el personaje que más portadas de revista ha protagonizado en los últimos años. Esto la convierte en una inmejorable guía para repasar algunos de los trucos que aplican las revistas a sus imágenes y, en particular, a las de portada. Las que tienen el crítico cometido de inducirnos a comprar.

Un primer curioso fenómeno que afecta a las poses utilizadas como mascarón editorial es la multiplicación de los roperos, práctica en la que es campeona la revista Cosmopolitan. Vean como triplica un vestido en sus ediciones española (agosto 2003), francesa (noviembre 2004) y checa (agosto 2004).

Tratándose de una revista de estilismo hay que cuidar los detalles, por ello los responsables de la edición gala no encontraron adecuados los pendientes para el nuevo color escogido para el vestido, así que decidieron dejar la actriz sin esos ornamentos auriculares. Los checos, en cambio, optaron por lo contrario, reforzaron el contraste cromático disponiendo precisamente un fondo a juego con esos colgantes aditamentos. Lo que parece que no les convencía mucho era el tatuaje del brazo izquierdo, así que optaron por suprimirlo. Una imagen más detallada les ayudará a comprobarlo:

Los variables adornos que la estrella ha lucido sobre esa extremidad han sido objeto de alteración en otras ocasiones como podemos comprobar en una comparativa de la portada de Esquire de julio de 2007 con la versión publicada algunos meses después por la alemana Park Avenue donde han desaparecido las coordenadas de nacimiento de su prole. Otros les ponen el nombre de la ciudad en que fueron concebidos. Es duro para la auténtica "jet set" fijar recuerdos. Por contra, vean que el tintazo del antebrazo fue tolerado, quién sabe el por qué de esa discriminación.

La propia Cosmopolitan facilitó a la bella Angelina otro vestido en cuatro colores, cierto que en un ancho de banda más restringido, en el territorio de las longitudes de onda más cortas del espectro visible. Aquí se observa otra manía de los directores artísticos cual es voltear las fotos, hecho que en personas asimétricas por razón de sus tatuajes, como es el caso que nos ocupa, canta bastante. Aquí sí que procedía haber dado un toque con el "tampón de clonar".

Lo de recolorear, girar y destatuar a la diva vale, pero que una revista tan sabia en cuestiones de moda "calce" una foto con casi seis años de antigüedad, eso sí que nos parece pasarse un poco, porque resulta que la última portada del cuarteto es el número alemán de enero de 2009, mientras que las dos que inician la serie fueron publicadas en octubre de 2003. Voy a comprarme un vestido como el de Angelina para ir a la moda. Y se planta usted en cualquier fiesta con un trapito de hace más de un lustro. Eso no se le hace a los clientes.

Pero seamos justos, no vaya a parecer que todos los coloreados son cosa del Cosmopolitan, así que vamos a incluir otro vestido que cuatro revistas diferentes han visto en otros tantos colores.

Volvemos con los tatuajes porque la sra. de Pitt tenía algunos (tranquilos, no le ha pasado nada, símplemente se los ha quitado) que delataban mucho más ostensiblemente la inversión de algunas fotografías. Véase en las siguientes dobles parejas:

Tras aclarar que la ubicación correcta del crucífero manchurrón es el costado izquierdo de la portadora (el de gold.de y Cosmopolitan), suponemos que bastantes lectores habrán observado que los responsables del "Cosmo" australiano decidieron que hacía falta más collar y no dudaron en arreglar esa deficiencia del posado. Claro que ese adorno formaba parte de una promoción de la revista: va a llevar usted los mismo que la Jolie tendrían los compañones de proclamar. Ya puestos, las declaraciones de la sobrevenida vendedora tampoco tienen desperdicio. Una sociedad retratada por el ideario de los campeones de las estadísticas de facebook.

Complementamos la serie con un par de versiones más, destatuadas por cierto, que ponen de manifiesto que esta camiseta la tiene en casi todos los colores. ¡Menudos armarios debe necesitar esta mujer!

Si antes veíamos como el Cosmopolitan francés le arrebató digitalmente unos pendientes, también cabe ponérselos. En 2007 dos revistas españolas utilizaron fotos de una misma sesión para ilustrar sus portadas. Mientras que en Fotogramas (setiembre) la actriz apareció sin pendientes, como en el resto de revistas que utilizaron fotos de esa serie, Lecturas (junio) optó por colocarle unos brillantes, amén de dotar a la foto de un fondo vegetal. Observen también que la publicación cinematográfica optó por corregir la leve imperfección cutánea sobre el ojo derecho. Las guapas oficiales no tienen tachas. Algún día volveremos sobre las pecas de Bar Refaeli, unas desconocidas para algunos de sus fans. De Lindsay Lohan ni hablamos porque bien podría protagonizar el chiste de la pecosa que va a confesarse (enlace para quienes no sepan de que estamos hablando).

El vestido utilizado tiene su punto de misterio porque ya había aparecido en 2005 con diferentes colores en algunas portadas aunque dotado de unos adornos desaparecidos en 2007. Y fíjense que en el año 2009 todavía era utilizado por la revista She para ilustrar su cubierta, eso sí, en una toma diferente con un encuadre posterior. Lo que ha cundido esa escotada prenda.

Quede claro que lo de cambiar los colores ya se hacía antes del advenimiento del Photoshop como bien podemos comprobar en un número de los años sesenta de la revista argentina Antena TV que también aprovechó para voltear la imagen de Brigitte Bardot según se deduce de la comparación con el cartel de la película "Le Mépris" (1963) que ya hemos visto en otro apunte dedicado a las imitadoras de BB.

Un último volteo angelínico, o quizá el de su máscara en algún museo de cera, nos permite traer a colación un buen ejemplo de escote-guitarra. Esta pareidolia (hace tiempo que no publicamos con esta etiqueta, algo habrá que hacer) no ha sido desaprovechada por los creativos publicitarios para realizar alguna pícara insinuación. Véase un ejemplo más abajo.

Los editores no se han conformado con ampliar el surtido de colores de la prendas. Seguimos con un caso en el que los responsables de la revista alemana "TV Movie" decidieron que la pose estaba falta de escote y no dudaron en colocarle uno sobre la marcha con un tanto extraño "push up" aplicado al pecho izquierdo (esta lateralidad nos la confirma el tatuaje que la revista B también se empeñó en suprimir, ¡qué manía!).

La citada revista alemana de televisión tiene una dirección artística bastante ácrata, porque si hay un vestido cuyo color ha sido respetado en sus numerosas apariciones sobre las cubiertas es el que tenemos registrado por primera vez en la revista Premiere de octubre de 2004. Pues los germanos tuvieron que convertirlo en rojo y, además, nuevamente procedieron a retocar el busto con otro de sus sombreados, creando así la sensación de que el vestido era más escotado. Manía de no dejarle en paz a la chiquilla sus naturales dones que no es por este rumbo por donde le fueron concedidos con mayor generosidad.

Con haber tenido mucho éxito, el vestido anterior no es el más visto en las cubiertas, ese honor le cabe al que cierra el apunte de hoy. Y podemos asegurar que nos hemos dejado varias portadas fuera de esta composición que se inicia con la edición coreana de Stuff de mayo de 2005.

¿Demasiada Angelina?

Coda: aunque no encaja bien en el discurso de hoy, no sería justo privarles de la primera portada protagonizada por Angelina Jolie que tenemos registrada. Septiembre del 95, tenía pues 20 años. Si conocen alguna anterior no duden en hacérnoslo saber en sofi7vetusta@gmail.com