++ señales

Aquí somos de los que, a diferencia de muchos de nuestros políticos, pensamos que lo prometido es deuda, así que vamos a continuar nuestro particular repaso del arte de la señalización. Ya advertíamos en el apunte anterior con abundante apoyo gráfico la tendencia a contravenir las prohibiciones. Veamos otro ejemplo de lo sorprendente de la conducta humana. Se pone una humilde señal solicitando que no sea apedreada y, por muy educada que se la petición, el personal lo toma por una provocación y al poco tiempo ya la han dejado hecha un asquito.

Este tipo de conductas nos hace temer que la muy sensata prohibición de los tacones en los engomados parques infantiles no sea capaz de evitar que mamás y cuidadoras renuncien a los dictados de la moda. En defensa del costoso patrimonio público, nos permitimos sugerir una estrategia más sibilina ¿qué tal si creamos algo de incertidumbre sobre el resultado de la transgresión sobre el llamado fondo de armario de las posibles infractoras? La señal ya está en uso en Dinamarca, aunque no con este novedoso fin.

Si venimos de señalar lo sorprendente de algunas conductas humanas, no podemos evitar un breve aparte para llamar la atención sobre el binomio mujeres-zapatos. Algún día volveremos con más detenimiento sobre este asunto, hoy lo ilustramos con una anécdota visual de la no especialmente coqueta Angela Merkel ¿Qué le llamaba la atención durante su encuentro con la Kirchner?

Después de comparar los estilismos que calzan las dirigentes de Alemania y Argentina, y antes de abandonar nuestros queridos parques infantiles vamos a lanzar algunas propuestas a mayor gloria y disfrute de nuestros compulsivos prohibidores municipales. 

Sin embargo la señal que, de verdad, nunca nos gustaría ver es la que tomamos de un anuncio de Seat realizado por la agencia Delvico Bates de Barcelona en 2002.

Aun así, lo cierto es que un poquito de ironía también suele funcionar bien para enfatizar los mensajes. Veamos algunos casos:

A veces topamos con mensajes que aunque no son irónicos lo parecen. Por razones cuya explicación no es sencilla y exceden con mucho los objetivos de este apunte, el cartel reproducido más abajo hace una manifestación correcta en la ingeniería de tráfico, pero que resulta totalmente incomprensible para los receptores del mensaje a los que termina por cabrear un poquito. Cosas de los ingenieros, que no reciben formación en sociología. 

Aprovechamos este ejemplo para advertirles que no se crean muchas de las cosas que se ven en internet porque hoy en día el Photoshop está al alcance de cualquiera.

Otra regla de oro del buen diseñador es no dejar espacios libres porque hay mucha gente a la que le gusta interactuar con la cartelería de otros.

De hecho, las señales son un soporte muy querido por los artistas urbanos que tiene  especial fijación con la de dirección prohibida.

También podemos ver cómo las interacciones no tienen por qué ser necesariamente gráficas, mire que clarito queda que no se pueden tirar ladrillos. Otro día nos extenderemos un poco más sobre algunas intervenciones de artistas urbanos relacionadas con este terreno.

Una estrategia de comunicación más que parece efectiva para llamar la atención sobre lo advertido es la representación de las consecuencias con cierta crudeza. Pero tampoco hay que pasarse con excesos como calificar de invencibles a lo alces, que luego se enfadan los fabricantes de coches que proclaman que sus productos pasan la llamada "prueba del reno”. No hablemos ya de proponer amputaciones, que por mucho menos te montan un escrache.

Fundamentar las prohibiciones con la ejemplificación de sus motivos parece asímismo una actuación sensata que suele dar bastante juego a los diseñadores imaginativos.

  

Lo que sí es muy importante es evitar las contradicciones, por más que en algunos casos resulten difíciles de esquivar, vean lo que ocurre en la localidad abulense de Aveinte que toma su nombre de la distancia (en km.) a la que está situada de  la capital provincial.

Si se molestan en consultar el enlace de la Wikipedia que les hemos insertado podrán comprobar que como siga la tendencia demográfica allí representada el nombre no tardará en expresar también los habitantes del pueblo. Eso sí, tienen alcaldesa para ellos solitos, que sabido es que a D. Mariano le da mucha pena suprimir municipios. Junto a la señal abulense se muestra otra contradicción entre la versión numérica y textual en un indicador de la autopista I-90 de Idaho en un punto próximo a la frontera con Montana, uno de los varios estados de la Unión con nombre de inequívoco origen español.

Y ya que hemos mentado al Presidente del Gobierno, ¿se acuerdan de qué Diputación Provincial fue presidente? La solución es la misma que la de la pregunta que ya formulábamos al final de este otro apunte. Este hombre a quien algunos lectores tuvieron dificultad para identificar como el “stairwayman”, ¿verdad Arturo? (tranquilo  que algunos han llegado hasta aquí sin conseguirlo), en nuestra, hasta ahora, única entrada en fromlostiano imprime carácter allá por donde pasa. Vean, vean:

Como esto se alarga porque nos hemos metido en un terreno que incita al abandono del tono festivo del apunte de hoy y, además, estamos lejos de agotar el material que les queremos dar a conocer, emplazamos a nuestros lectores a seguirnos en una próxima entrega y finalizamos esta con la solución al acertijo planteado en la que inició la serie. De puro fácil que era, vamos a despachar el trámite con una simple imagen de la adolescencia del personaje.