Edificios colgantes (I): los pioneros

El fallecimiento del arquitecto Antonio Lamela, que se produjo el pasado primero de abril, ha propiciado la publicación de algunos artículos, como el que encontrarán en el siguiente enlace al diario El País, en los que se recuerdan algunas de sus obras más significativas. Destacan entre ellas las Torres de Colón, cuyo proceso constructivo asombró a quienes pasaban por el centro de Madrid a comienzos de los años setenta. No en vano se trataba del primer uso que se hacía en España de la edificación suspendida, una tipología que en aquel entonces contaba con menos de una veintena de antecedentes en todo el mundo.

El concepto ya había sido planteado en los años 20 por los hermanos Bodo y Heinz Rasch, que no llegarían a ver construido ninguno de los diseños que idearon. A continuación mostramos algunos de ellos.

También fue en los años veinte cuando el arquitecto norteamericano  Buckminister Fuller comenzó a desarrollar la casa "Dymaxion", que no llegó a pasar de la fase de prototipo. Se trataba de un concepto unifamiliar mucho menos ambicioso que los anteriores.

Debajo puede verse el artículo titulado "Casas que cuelgan de un poste" que en 1932 dedicó la revista Modern Mechanix a ese concepto de vivienda prefabricada destinada a ser producida en serie.

 

Pero no fue hasta los años sesenta cuando algunas estructuras suspendidas tomaron cuerpo, como es el caso de la sede de Amberes de la petrolera BP proyectada por Léon Stynen y Paul De Meyer. Un edificio de once plantas que fue concluido en 1963.

 

El esquema estructural consta de un núcleo resistente de hormigón que transmite al suelo las cargas que llegan a una cabeza formada por unas ménsulas donde se anclan los tirantes metálicos de los que cuelgan las plantas del edificio.

Similar tipología tiene el, según nuestros registros, algo posterior edificio construido en Eindhoven como sede de Philips. Un diseño de la firma de arquitectos Roosenburg-Verhave-Luyt-de Longh (hoy en día LIAG).

Algunas de las cronologías históricas de este tipo de construcciones que hemos encontrado, aparecen encabezadas por el edificio Overbeek del complejo Europoint de Rotterdam, pero este proyecto de planta cuadrada realizado por el estudio estadounidense Skidmore, Owings & Merrill (proyectistas W.E. Dunlap, M. Goldschmidt, G.J. Jarik) no fue concluido hasta 1965.

Al año siguiente se finalizaron las dos torres en que finalmente quedaron las cuatro proyectadas por Johan Hendrik van den Broek y Jacob Berend Bakema para el ayuntamiento de la ciudad alemana de Marl.

Otro ejemplo de esa época, en el que incluso contamos con una imagen del proceso constructivo, es la Finland House de Hamburgo que fue concluida en 1966.

 

El concepto también se aplicó en un edificio tan significativo como es el Berlaymont de Bruselas que alberga a la Comisión Europea. El diseño del arquitecto Lucien de Vestel fue construido bajo la dirección de Jean Gilson en colaboración con Jean y André Polak. Junto a estas líneas puede verse una imagen de la obras de ese edificio que tuvo sus primeros ocupantes en 1967, cuando tan solo se había concluido una de sus cuatro alas. Años después tuvo que ser evacuado y sometido a una profunda rehabilitación para retirar los asbestos empleados.

En el propio 1967 comenzó la construcción de las Torres de Colón, cuya estructura convencional inicialmente prevista fue transformada en suspendida. Y ello para despejar de columnas el subsuelo y poder hacer frente al incremento de plazas de aparcamiento exigido por el ayuntamiento tras un cambio de la ordenanza aplicable. Pero en este caso, que veremos con más detalle en un próximo apunte, el número de plantas suspendidas ascendía a veinte, lo que suponía casi duplicar el máximo visto hasta entonces.

Y es que para aplicar esta tipología estructural a mayores alturas de las anteriormente vistas, lo que se hizo en el Standard Bank of South Africa de Johannesburgo, iniciado en 1968, fue dividirlo en 3 bloques de nueve plantas que se colgaron de tres plataformas soporte uniformemente espaciadas.

Frente a tanto soporte masivo como hemos visto, resulta destacable como el edificio conocido como The Qube, construido en 1968-69 en Vancouver por la Westcoast Transmission Company, lo que hizo fue prolongar el núcleo estructural para anclar directamente en el mismo los tirantes de los que cuelgan las 13 plantas. No es raro que la serie de TV MacGyver lo hiciera pasar por sede de la Phoenix Foundation para la que trabajaba ese héroe televisivo tan apañado. 

 

Resulta oportuno recordar que también caben otras tipologías estructurales, como la basada en el uso de cerchas. Un sistema que fue utilizado en el edificio parisino diseñado por Claude Parent que fue inaugurado en 1969 como Casa de Irán. Propiedad hoy en día de la Fundación Avicena, permanece en desuso por la dificultad de rehabilitarlo conforme a la normativa que ahora resulta de aplicación. Y es que algunos alardes acaban por pasar factura y, a veces, pasado no mucho tiempo.

Otro ejemplo de edificio de esta tipología con problemas de conservación es la Norcon-Haus de Hannover que fue demolido en el año 2014 tras poco más de 30 años de vida útil. Construido en 1981 según proyecto de los arquitectos Klaus Schuwirtz y Erol Ermann, lució su aspecto más grácil cuando fue desambarazado del cerramiento del bajo durante la demolición. Un proceso que también proporcionó buenas imágenes de la estructura portante.

Retrocedemos hasta 1973 en que se construyó el edificio Marquette Plaza de Minneapolis diseñado por Gunnar Birkerts. En este caso se combinó el soporte que proporcionan las jácenas superiores con el que aporta una catenaria similar a la de los puentes colgantes. Una solución que provocó muchos problemas de ajuste, especialmente de las ventanas, lo que propició que la Reserva Federal de Minneapolis que lo había construido buscara una nueva sede en 1997 y procediera a venderlo.

El estructuralmente recíproco recurso a un arco fue utilizado en la Exchange House de Londres en 1990, pero ese apoyo que permite un bajo muy diáfano está al servicio de una estructura, en lo demás, bastante convencional.

Una construcción en la que los arcos asumieron mayor protagonismo resistente al colgar directamente de ellos las plantas es el edificio berlinés Ludwig-Erhard-Haus, que fue finalizado en 1999. Con el concluimos este repaso de los trabajos pioneros en la aplicación de las principales tipologías de suspensión de edificios. En una próxima entrega nos ocuparemos del uso de esas técnicas en España.

Enlace a la segunda parte.