Un paseo por Madrid

No creemos que les cueste reconocer al personaje cuya imagen, sin distorsión photoshopera alguna, abre el apunte de hoy.

Y es que hemos salido de paseo por Madrid con la cámara a cuestas. En esas deambulaciones nos gusta acercarnos de vez en cuando a la Plaza del Rey a comprobar si la desidia del consistorio madrileño todavía permite ver a Jacinto Ruíz. Así es como está ahora la cosa:

Ya se ve que a gentes tan pacifistas como las que gobiernan la capital estos monumentos les gustan mas bien camuflados, no vaya a ser que haya a quien se le ocurra hacerse un selfi con tan poco políticamente correcto fondo. Pero nosotros no hemos dudado en colarnos entre el follaje para que vds. que puedan recordar al héroe del 2 de mayo.

Luego nos fuimos a la Fundación Telefónica donde tuvimos un encuentro con los pájaros de Hitchcock en el marco de la exposición sobre el mago del suspense que se prolongará hasta el 5 de febrero.

Ya en Sol pudimos comprobar como a Carlos III también le gusta interpretar escenas de la famosa película. Probablemente asqueado se salir en tantas fotos con horribles fondos publicitarios.

Y es que resulta penoso tanto lío como hubo para desmontar anuncios, incluido el traslado del indultado de "Tío Pepe", para acabar con esta burla de la normativa realizada sirviéndose de lonas de obra. Muy mediocre técnica legislativa la que produce normas tan fáciles de eludir. Esta es la globalización que no no gusta.

Suponemos que sería la proximidad de Halloween la que justificaba la presencia de algunos siniestros muñecos entre los personajes que habitualmente pueblan el bullicioso espacio que rodea el km 0 patrio.

Pero si de atrezzo para fotos se trata, la última turistada de la Plaza Mayor es el torero con flamencas. Hasta cinco grupos de figuras dispuestos al efecto estaban disponibles. Y trabajando mucho, oiga.

Al menos hay clientela que se lo toma con un plus de humor, como el barbado grupo cuyas caras hemos distorsionado un poquillo para preservar su anonimato. Aun así, el mas alto todavía puede pasar por Pérez Reverte. Y adviertan como vela el responsable de la "atracción" por la consecución de gallardas poses con enhiestas barbillas.

Llegados a la plaza del Reina Sofía hasta dudamos si lo que veímos no sería una instalación, pongamos por caso de Tracey Emin. Vean vds. el montaje del "sin techo" que ha decidido que ese "sin" no obliga a ser también sin cama, mesilla, alfombra, ... 

 

Cuanta desidia del gobierno municipal, porque ¿qué suerte de ideario político es el que puede justificar estas alienaciones en las calles?

Terminamos este paseo fotográfico con la imagen completa de la que hemos extraído la del inicio. La acompañamos con una vista de la lona gigante del ahí doblemente gran Rafa Nadal tomada desde la acera de enfrente. Esta, a diferencia de la inoportuna publicidad de Calvin Klein, no molesta. Mas bien todo lo contrario. La Gran Via es otra cosa.