viernes, 25 de marzo de 2022

Un mes de criminal infamia (3ª parte: el sangriento impasse)

 

Completamos el resumen del trágico último mes vivido en Ucrania visto desde el humor gráfico (enlaces a la primera parte y a la segunda parte).

Patrick Blower apuntó el día 9 la pobre imagen que está dando la supuestamente poderosísima maquinaria bélica rusa. Bill Bramhall reincidía el día 21 sobre esa cuestión que invitaba a Matt Wuerker a especular con las rendiciones de cuentas que pudieran estar produciéndose en el KremlinBenn Jennings  sumó una lúcida visión del papel que están jugando esos atemorizados mandos del ejército ruso.

Pero fue el dibujante de francés Laurent Salles (L'Alsace) quien tuvo el coraje de plantear abiertamente el único sentido que cabalmente cabe dar a la desvergonzada pretensión de estar haciendo una  desnacificación esgrimida por los rusos. 

Un disparatado argumento que Andy Davey llevó a su visión de la tragedia de los refugiados.

El recordatorio de una ironía de Nick Newman sobre la posible bisoñez de una parte de las tropas rusas da paso al tremendamente expresivo uso que dio Christian Adams al identificador de los invasores (más sobre el mismo en Humor con zetaen el dibujo que da inicio a La semana en viñetas 10/2022, encabezando un batería de referencias a los mal llamados "corredores humanitarios".

Otro poderoso símbolo de la barbarie, magníficamente utilizado por Tomás Serrano y Ann Telnaes, han sido las maletas de una familia asesinada por el ejército ruso cuando trataban de abandonar la ciudad de Irpin por uno de esos corredores. 


JL Martín encabeza un bloque completado por los dibujantes estadounidenses Jack Ohman y Joel Pett que invita a reflexionar sobre la indignación que cabe mostrar ante cuestiones de tan distinta gravedad.

El propio Martín Padylla aportan visiones sobre ese vacuo activismo de redes sociales que J.R. Mora complementa con una macabra versión del barandillero meme tratado en 'Sidewalk superintendents'.


Joep Bertrams fue el único a quien vimos ocuparse de las escandalosas palabras de apoyo a la guerra del patriarca de la Iglesia Ortodoxa, que la ha visto como una cruzada contra el lobby gay


El ataque a un hospital materno infantil de Mariupol es otro de los vergonzantes hitos de la invasión. Unos hechos que inspiraron la maternidad que sigue de Malagón, así como una crítica de Steven Camley sobre la desinformación practicada por los medios de comunicación rusos. Una cuestión expresivamente tratada también por Miki y Duarte en su tira del pasado domingo. 


Realmente impactante resultó la protesta que dio pie a realizar el monográfico Reconocimientos gráficos a la valentía de Marina Ovsyannikova. Nuevamente mostramos nuestra preferencia por la visión de Pierre Kroll que hoy recordamos seguida por la de Miki y Duarte sobre la detención en San Petersburgo de Yelena Osipova, una pintora rusa de 77 años. 


En el apartado de "beneficiados colaterales" por el conflicto hay que apuntar a Nicolás Maduro, cuestión que trataron tanto Oroz  como Antón, mientras que Chaunu dio expresiva cuenta en el humor galo de que esta guerra seguramente será determinante para que Macron repita como presidente de Francia (¿Conocen a mi director de campaña? / Sondeos: Macron 30%).


Tanto Oroz como Pablo García se ocuparon del peligroso acercamiento de las hostilidades a la frontera polaca en viñetas que recogimos en La semana en viñetas 11/2022.


Y Brian Adcock dio zoológica cuenta de la tibia posición china en un dibujo que forma parte de la colección Unos putinescos osos que, al igual que el de Peter Broelman que sigue, ponen antecedente a la hibridación especies ideada por Asier y Javier el pasado día 20.

Solo vimos a Tomás Serrano dar gráfica cuenta de la pública asunción de Zelenski (enlace a su monográfico) de que Ucrania no podrá acceder a la Otan. Pero el presidente ucraniano sigue convertido en el infranqueable muro que Putin, relacionado / convertido en numerosas viñetas con Stalin y Hitler no es capaz de franquear. 





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