En el último repaso del mes pasado ya anticipábamos la 19ª portada que Barry Blitt ha realizado para el semanario The New Yorker con Donald Trump como protagonista. La trigésima que esa revista ha dedicado al presidente de Estados Unidos, con inaudita fijación. Y un auténtico desperdicio del acreditado talento del ilustrador canadiense. La presentamos emparejada con la relajada escena invernal titulada “Off the Path” (Fuera del camino), firmada para Gayle Kabaker en el número posterior.
Y añadimos las cuatro portadas precedentes de la artista criada en Hong Kong, posteriormente afincada en Norteamérica. La última de ellas tiene versión animada.
Volvemos a la actualidad de marzo con la tapa de Malika Favre titulada “Spring to Mind” (primavera a la cabeza), que la revista neoyorquina escogió para su Spring Style Issue.Esta séptima portada de la ilustradora francesa afincada en Londres, que declara haber inspirado su trabajo en Frida Kahlo, cuenta, al igual que todas sus anteriores, con una versión animada que confrontamos con la convencional.
Debajo añadimos las animaciones del resto de sus portadas.
Cabe destacar que esta artista estuvo a punto de sumar una cubierta más en noviembre de 2016, porque su ilustración titulada "The First" había sido elegida para el caso de que Hillary Clinton hubiera ganado las elecciones presidenciales. Pero la victoria de Trump provocó que la finalmente publicada fuera la pieza de Bob Staake titulada "The Wall".
El motivo elegido para el cuarto número de marzo de la revista neoyorquina es una referencia al brexit titulada "Crazy Time", obra de Mark Ulriksen. Este es un artista que ya supera las sesenta portadas en una serie que inició en 1994, cuando representó a los Clinton para el último número de mayo de aquel año.
En el siguiente enlace puede verse la colección de sus trabajos hasta 2017. Una información que complementamos añadiendo, a modo de colofón, las cinco tapas que firmó el año pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario