Hoy comenzamos con la prometedora línea creativa que desarrolla la emergente "nueva normalidad". JJ Aós puso el lunes en boca de Fernando Simón las nuevas divisiones temporales formuladas conforme a esas confusas fases que alguna cuadriculada mente decidió comenzar a numerar por el cero. Siguen las ahora omnipresentes colas, vistas por Sansón, la neoinsultología según J. Morgan y un cambio de hábitos estéticohigiénicos anticipado por Napi.
Continuamos con la preocupante visión e la normalidad china de Álvaro (y si en el apunte de ayer échabamos en falta pangolines en el humor español, ahí tenemos uno), seguida de la visión rural del gran especialista en esa línea humorística que es el vigués Luis Davila, 'O Bichero'. Completan este bloque dos viñetas de hoy mismo: la emotiva pincelada de Miki y Duarte y el antagónico brochazo de pesimismo de Fontdevila en Ara que, vale que inserta un quizá (potser), denomina "los buenos tiempos" a este "primer confinamiento" ¡Caray!
Entre las aportaciones del humor francófono sobre esta emergente cuestión hemos seleccionado las viñetas de Cambon, Man, Alex (Suiza ha decretado la obligación de facilitar los datos de identidad en los restaurantes) y Herrmann, que ya imagina algunas pillerías sobre la norma anterior (¿Mi nombre se mantendrá confidencial?; depende de la propina).
No es humor, aunque pudiera parecerlo, bien que del malo, lo del manifiesto de Le Monde. Una poco oportuna proclama, si bien faltó condenar el uso de guantes de plástico para protegerse, que considera impensable volver a la "normalidad". Un breve texto con algunos destacados abajofirmantes españoles que ha recibido alguna réplica tan mordaz como la de Jorge Bustos.
Desde la prensa británica nos hemos traído un cambio de sospechosos anticipado por Morten Morland, la distanciada versión de los muy británicos espectáculos de guiñol de Punch&Judy de Graeme Keys y una detallada secuencia de nuestras futuras jornadas, imaginada por Blower.
En La semana en viñetas 17/2020 ya vimos una anticipatoria referencia del dibujante belga Dubus a las nuevas distanciadas formas del disfrute playero. Y hace unos días hemos visto una más bien distópica visión complementaria del autriaco Marian Kamensky.
El martes ya reseñamos la recreación realizada por Tomás Serrano en El Español de la famosa portada de Ramón en Hermano Lobo del 2 de agosto de 1975. Pero la amenaza con el caos de Sánchez + Ábalos dio pie, ya el miércoles, a otros recordatorios, si bien exclusivamente conceptuales, de esa célebre pieza de humor: Peridis y Ferreres. [1]
El laberinto de incoherencia en el que acabó sumido Pablo Casado, cada vez más convertido en patrón solo apto para viajes a ninguna parte, suscitó una crítica pieza de Sansón sobre esa forma del "cuanto peor mejor". JM Nieto fue mucho más condescendiente con la aportación desde Abc de un argumento, de bastante veraz fundamento, pero de tintes más bien nihilistas.Y aún lo reforzaría ex post con un dibujo que, aún desde un muy escaso aprecio al actual presidente del gobierno, se nos hace claramente injusto.
Puebla aportó una nueva pieza para el apunte El espejo mágico de la reina de Blancanives en el humor gráfico, mientras que Ricardo, que comenzó la semana ocupándose Trump en El Mundo, centró su viñeta del martes en la constatación de qué puede esperar el presidente del gobierno de ERC (aunque eso ya lo dejó bien claro Montse Basa el pasado mes de enero). Pero, en definitiva, la nave en el estado representado por Miki y Duarte. 
Decía Bustos en su columna del miércoles que "si Ciudadanos generara tantos votos como debates, Arrimadas superaría los 202 diputados de Felipe González". Pero lo que es en viñetas, la despiadadamente criticada dirigente de Ciudadanos (particularmente por algunos de sus excompañeros; no hay peor cuña ...) solo apareció en la cinematográfica pieza de Tomás Serrano. Gallego y Rey optaron, en cambio, por un despersonalizado paracaídas naranja.
Pasamos a informar a los interesados en las patologías obsesivas, que Aznar, personaje de enorme relevancia informativa esta semana, fue el protagonista de la viñeta del martes de Fer en El Punt Avui (esa nos ahorramos aportarla). Al día siguiente, el lazado dibujante de origen leonés ya se animó con un pellizquito de monja a Esquerra, mientras que para Manel Fontdevila el soprendente tema del día en la jornada posterior al polémico pleno del Congreso, fueron los testaferros que pululan por Suiza. 
Completa este bloque Ferreres con una irónica visión del papel de las CC. AA. No hay manera de que le regale una caricatura de su hábil factura a la consellera de Salut Alba Vergés.
Tan solo vimos a Sansón ocuparse del inaceptable, a más de ilegal, anonimato del comité científico. Ello por más que el argumento de evitar las presiones que a buen seguro iba a recibir resulte indiscutible: un claro ejemplo.Javi Salado puso, por su parte, el dedo en una sangrante llaga que nos trajo a la memoria el apagón informativo sobre la ingente cantidad de mossos en cuarentena por falta de tests. ¿Hay algún periodista por ahí?
Y es que donde este el crítico problema de consumo de pizza por los niños madrileños, que se quite ... Hasta el humor canario de Padylla llegó Díaz Ayuso (que ayer hizo bis en esos diarios) de la mano de tan artificiosamante sobredimensionada cuestión (un enlace por si les interesa la verdad de este ejemplo de manual sobre la práctica de la desinformación). Emparejamos esa viñeta con la visión de Malagón en El País de hoy.
Quede claro que no resulta censurable que el humor busque el favor de los lectores apoyado en lo anecdótico, incluso caricaturescamente mixtificado. Son otras secciones de los medios de comunicación a las que es exigible que no olviden ocuparse de lo sustancial. El tuitero Philmore A. Mellows puso expresiva imagen a ese informativo principio.
Otra viñeta que nos sirvió de recordatorio, en este caso del acallado asunto de las dietas de nuestros parlamentario, fue la adjunta de Faro / Da Col.Bastante llamativo nos pareció el considerable eco humorístico que tuvo el viernes la muerte del policía de la franquista brigada político social 'Billy el Niño'. Incluso fue la sorprendente elección de esa jornada realizada por Sciammarella para su galería de retratos de El País. Lo que es humor, bien que con un difícilmente evitabe toque macabro, creemos que solo acertó a hacerlo Argote en Deia con su adjudicación al coronavirus del papel de Pat Garret. El resto de lo que vimos más bien nos parecieron exorcismos.
Con todo, esa elección del dibujante vasco no deja de ser una forma de evitar ocuparse de muy sintomáticas inmundicias del presente. Y alguna con notable proyección de futuro, además. Como la votación-lavamanos que rechazó el nombramiento de Francisco Llera como profesor emérito de la Universidad de País Vasco. Un repugnante acto de abstencionista cobardía que anteayer denunciaba Savater en su columna de El País. ¡Alguna vez habrá que echarle güevos a lo de casa, sr. pnvibujante!
Proseguimos con la estopa navarra que Oroz propinó a esos opinólogos que tanto daño han hecho en esta crisis con su ignorante fomento de muy imprudentes estados de opinión. Pues ahí $iguen perorando, absolutamente ayunos de arrepentimiento. Aunque peor es lo de algún supuesto hombre de ciencia que ejerce de recordatorio de que fuera de su especialidad, no hay que confundir virólogos y epidemiólogos, todo el mundo es básicamente un lego. Y que quien es imprudentemente tonto, pasa serlo en grado superlativo (perora, además, sobre un argumento distorsionado: no se carga sobre las manifestaciones del 8-M el grueso de la responsabilidad de los contagios, sino la de ser el motivo del aplazamiento de la restricción de las concentraciones multitudinarias).
Proseguimos con la estopa navarra que Oroz propinó a esos opinólogos que tanto daño han hecho en esta crisis con su ignorante fomento de muy imprudentes estados de opinión. Pues ahí $iguen perorando, absolutamente ayunos de arrepentimiento. Aunque peor es lo de algún supuesto hombre de ciencia que ejerce de recordatorio de que fuera de su especialidad, no hay que confundir virólogos y epidemiólogos, todo el mundo es básicamente un lego. Y que quien es imprudentemente tonto, pasa serlo en grado superlativo (perora, además, sobre un argumento distorsionado: no se carga sobre las manifestaciones del 8-M el grueso de la responsabilidad de los contagios, sino la de ser el motivo del aplazamiento de la restricción de las concentraciones multitudinarias).
Nos apoyamos en la Ayuso un poco Kate Perry que le salió a Ricardo para ilustrar la que le cayó, aunque no en el humor gráfico, a la presidenta madrileña por pretender forzar el cambio de fase. Lo del no menos desautorizado García Page debió ser, en cambio, puro exceso de compromiso con la economía de su comunidad. Double standards, dicho sea en inglés, que resulta más pijés.
No podemos evitar una pincelada localista, porque nos parece muy ilustrativa del postureo que impregna el actual ejercicio de la política. Quizá hayan escuchado en los noticiarios la pretensión asturiana de pasar dos comarcas directamente a la Fase 2. Pero un detalle que olvidaron contarles los periodistas de turno es que se trataba de hacer una excepción para poco más de ocho mil personas. Sí, sí, #8.000# (como en los antiguos cheques).
Ante el ridículo al que ha conducido tan patente falta de sentido común, el principal diario astur titulaba ayer El alivio de no cambiar de fase su explicación de que, al parecer, nadie quería esa medida en los territorios afectados. O sea, que eran cosas de un tal Barbón & co. para abrirse un hueco en los telediarios. Y le pagamos la tontería nosotros y vd. (caso de ser residente fiscal en España).
Una viñeta de Faro /Da Col nos ayuda a reseñar la preocupación, compartida por diversos humoristas como Miki y Duarte (estos con un paralelismo formal, que no conceptual), sobre por los efectos de un indisciplinado aumento de las salidas de casa.
Más dinosauriadas. La retirada de la acusación contra el general Michael Flynn, el consejero de seguridad de Trump que se había declarado culpable de mentir al FBI en la investigación por la interferencia rusa, es una preocupante muestra más de la degradación de las instituciones que (también) vive Estados Unidos. Lo mostramos en la visión de Matt Davies, mientras que Pat Bagley aplicó una muy dura metáfora a la actitud del fiscal general Barr (cuyo cargo, no se despisten, equivalente a nuestro Ministro de Justicia). Aún más expresiva que la mortal utilizada por Bill Bramhall. 
Morten Morland aporta desde The Times una visión de los equilibrios comunicativos imperantes en estos tiempos de políticos que ejercen puestos en las manos de sus asesores de comunicación [3].
Y si te cuelan una referencia a un inexistente informe de una prestigiosa universidad, en vez de reconocer con humildad lo obvio, que te la han colao, te parapetas en la mentira con la ridícula nadería "los datos están ahí". Como ayer hizo Pedro Sánchez ante una pregunta de la CNN que le desnuda ante el mundo.
Vamos a ir concluyendo con la simpática visión de la suiza Bénédicte de la carrera para conseguir una vacuna. Una viñeta que presentamos seguida de una contrapuesta visión española y británica (Santy Gutiérez y el irlandés Graeme Keys) sobre la muy ansiada, y eso en todas partes, reapertura de los bares.
Ningún dibujo hemos encontrado, de momento, sobre la muerte de Little Richard. Mala cosa es morirse, pero a los humorísticos efectos que nos ocupan, el peor día para hacelor es, con diferencia, el sábado.
Como colofón de esta colección de 52 viñetas, más cinco en notas al pie, aportadas por 24 firmas nacionales y 16 foráneas, recurrimos a la taurina visión de Oroz, que hoy marca un triple (al igual que Miki y Duarte, Ricardo, Sansón y Tomás Serrano), sobre el cambio de fase como una salida de chiqueros.
Y si te cuelan una referencia a un inexistente informe de una prestigiosa universidad, en vez de reconocer con humildad lo obvio, que te la han colao, te parapetas en la mentira con la ridícula nadería "los datos están ahí". Como ayer hizo Pedro Sánchez ante una pregunta de la CNN que le desnuda ante el mundo.
Vamos a ir concluyendo con la simpática visión de la suiza Bénédicte de la carrera para conseguir una vacuna. Una viñeta que presentamos seguida de una contrapuesta visión española y británica (Santy Gutiérez y el irlandés Graeme Keys) sobre la muy ansiada, y eso en todas partes, reapertura de los bares.
Como colofón de esta colección de 52 viñetas, más cinco en notas al pie, aportadas por 24 firmas nacionales y 16 foráneas, recurrimos a la taurina visión de Oroz, que hoy marca un triple (al igual que Miki y Duarte, Ricardo, Sansón y Tomás Serrano), sobre el cambio de fase como una salida de chiqueros.
[1] A Ferreres le conocemos otra versión previa, publicada el 5 de octubre de 2015 en 'El Periódico de Catalunya'. Debajo, otra formulación de concepto del mimo dibujante.
Del año 2015 es también la versión de Forges publicada en El País del 15 de mayo:
Anteriormente ya habíamos recopilado en La semana en viñetas 12/2020 las versiones de Peter Kuper, la primera que vimos sobre esto a finales de febrero, Oroz (14/3) y Bob Moran (21/3) que introdujo el entonces omnipresente papel higiénico.
[3] Después de publicado el apunte hemos visto, también en The Times, pero en el de hoy mismo, la chuleta de Nick Newman para la presentación de las medidas de alivio del confinamiento: jactancia, palabrería, cita en latín, pelo desordenado, citar bebé. Y añadimos el enlace a una interesante videocomparación entre Jacinda Ardern (Nueva Zelanza) y Boris Johnson.
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