La semana en viñetas 15/2020

Comenzamos nuestro habitual recorrido dominical por el humor de la semana con la viñeta de Guillermo Serrano publicada el lunes en El Español. Una visión adaptada a los renovados usos antipandemia de aquellos pactos de La Moncloa que hay quien sueña reeditar. Improbable posibilidad en tiempos en que los codos solo se utilizan en política para descerrajar costillas. Al margen de lo visto en la poco edificante sesión parlamentaria del jueves, resulta notable, por ejemplo, lo pactista que estuvo el community manager del Psoe. Menuda réplica dio desde Twitter al apoyo del PP a la prórroga del estado de alarma, el que sus socios nacionalistas les negaron, con un vídeo de Casado de hace más de un año.

Idígoras y Pachi  también evocaron, en su caso ayer, dos figuras clave en aquellos transcendentales acuerdos del 78.

Esteban no pasó por alto el incorrecto manejo de mascarilla que mostró Sánchez en el publirreportaje de su visita a un fabricante de respiradores. Del pepero territorio Ifema ya se había encargado el rey. El dibujante de La Razón (y también del Grupo Joly) asimismo nos ayuda a reseñar el cambio de formato de las rudas de prensa. Un estreno en el que se puso de manifiesto el escaso aprecio de algún periodista hacia la policía.

Santy Gutiérrez metió a los Dancing Pall Bearers en su reseña de la citada rueda de prensa. Posteriormente vimos ese popular meme en viñetas del canario  Padylla y del mexicano Rictus (El Financiero). Los visitantes habituales ya sabrán qué pintan ahí esos gansos.

 

Dos dibujantes con bien contrapuestos posicionamientos ideológicos, Manel Fontdevila (esta en Ara) y García Morán (Gaceta de Salamanca), se ocuparon de poner de manifiesto las suspicacias que levanta la explotación de datos de geolocalización. Algo que, visto lo conseguido en Corea, deja claro que tanto en la izquierda como en la derecha hay gente dispuesta a palear muertos. Así que tuvimos que ir a hasta Suiza para ver, de la mano de Patrick Chappatte, auténtico humor sobre esa cuestión (Los datos celulares muestran que no estaban en el balcón aplaudiendo ayer por la tarde).

Entre la numerosas viñetas inspiradas en la celebración religiosa de la Semana Santa destaca, por la cantidad, la hasta hoy ininterrumpida serie evangélica iniciada por Fer en El Punt Avui el Domingo de Ramos.

No falta en la misma una peculiar versión del episodio en que Pilatos pidió a la muchedumbre que escogiera quien debía ser el beneficiario de su pascual prerrogativa de gracia.

Ese mismo episodio también fue objeto, ya con presencia de Barrabás, de viñetas de Javi Salado, que se ha marcado un reciclado de su viñeta del año pasado, y JJ Aós. En un caso al servicio del quédate en casa y en el otro para poner de manifiesto la falta del material de protección oficialmente recomendado por la OMS unos cuantos días antes. Ya se verá qué pasa con el anunciado reparto de mañana. 

Idígoras y Pachi aplicaron a Judas un ERTE en una viñeta que presentamos seguida por un control policial imaginado por Napi y la cadena de analogías procesionales del gaditano Mel. No ha quedado muy clara la cantidad de ese tipo de prendimientos que haya podido ser necesario hacer. Pero la inevitable preguntas es ¿está decayendo el sentido de la responsabilidad en paralelo a la curva de nuevos infectados?

Un buen consejo sobre la forma de llevara ahora la cruz fue el del irlandés Martyn Turner, mientras que Michael Kountouris y Martin Rowson fueron algunos de los dibujantes que recordaron que esta Semana Santa han sido los trabajadores sanitarios y otros servidores públicos quienes han cargado las más pesadas.

La excusa del perro contó con una procesional versión de Manel Fontdevila, mientras que Tomás Serrano la aplicó un salto cualitativo en su arquitectónicamente muy cuidada escenificación en el marco de la Plaza de San Pedro. Completa este canino bloque la peculiar procesión ideada por Javi Salado.

Si el pasado lunes ya veíamos una solitaria Última Cena de Marc Large apoyada en el canon iconográfico creado por Leonardo da Vinci, posteriormente se han sumado al mismo dibujantes nacionales como Álvaro o Davila. Argote optó, en cambio, por una más convencional disposición de la mesa con Jesús en la cabecera.  Padylla aporta una visión decididamente tecnológica en la que incluso desveló el contenido de la pantalla del correspondiente zoom. A su lado la visión del suizo Alex. El australiano David Rowe completa, con el primer ministro de su país como protagonista, esta necesariamente limitada panorámica de un meme que cuenta con un buen número de piezas adicionales.

 

El humor de Charlie Hebdo suele ir más allá de donde osa hacerlo la prensa diaria, demasiadas veces con reprobable exceso, pero no nos parece el caso de la adjunta visión de Foolz sobre la incorporación de cuanto personal sanitario ha estado disponible (Levántate y anda / Hemos contratado a quien sea).

Numerosos dibujantes han  vinculado la Resurreción con el confinamiento. En la viñeta de francés Delucq se reclama a Jesús el permiso para salir, en la del suizo Alex un poco colaborativo resucitado pasa de cumplir normas, mientras que el de belga Kroll se muestra mucho más respetuoso con lo prescrito (no puedo salir, estoy confinado). Morten Morland prescinde de todo texto en su versión del meme en el Sunday Times de hoy, una jornada en que el trascendental momento del cristianismo también está presente en las viñetas de Puebla, JM Nieto (que se permite dar algún retoque al evangelio de San Marcos), Javi Salado o Fer. Una significativa pieza, esta última, que no podemos dejar de reseñar por la incomparable contraposición que plantea: "Sánchez y su peña" frente a "Torra y los científicos". Así es su maniqueo mundo.   
 
 

Reseñamos el debate entre los líderes europeos sobre las medidas para afrontar la crisis con la visión del viernes del neerlandés Schot (Volksrant). Un dibujo donde no les costará localizar a nuestro presidente del gobierno.

Pero conviene no perder de vista la adjunta viñeta de ese mismo dibujante sobre la curva de popularidad de su primer ministro. Porque no son pocos quienes por aquí tienden a olvidar en sus apreciaciones que Mark Rutte no debe su puesto a los votantes españoles (que harían bien en leer lo que hoy explica Miquel Roig en El Confidencial).

La conclusión gráfica de Vergara en eldiario.es sobre el debate parlamentario nacional fue que la culpa de nuestros males es de Pablo Casado (y no esperen encontrar a nadie que huela a gobierno en la tira de hoy de Fontdevila en ese mismo digital). Desde luego, no es que el dirigente del PP resulte un émulo de Churchill, pero bastante más ponderada imagen de cómo andan las cosas es la ofrecida por Miki y Duarte.

Lo que ciertamente resulta difícil realizar desde el humor gráfico es una síntesis como la que Alsina condensó en dos escasos minutos de radio sobre el absurdo recurso de Sánchez y Lastra a fácilmente demostrables falsedades.  Hasta las tantas veces olvidadizas gentes de Newtral se vieron obligados a ponerlo de manifiesto.

Proseguimos el recorrido con los stickers aportados por Tomás Serrano. Una serie con la que Fdo. Simón, el experto obligado a rectificar demasiado, sigue engrosando su notable colección de caricaturas.

Toda una poderosa carga de profundidad hay en la viñeta del lunes de Santy Gutiérrez sobre los mayores. Y es que, como JL Martín  reflejó con elegante sutileza, la muerte se ha cebado con las residencias, donde la trágica estadística es todavía confusamente provisional. 

Vamos con un poco de humor más intrascendente, como el adelanto del aplauso de algunas calles, entre ellas la nuestra, puesto de manifiesto por Sansón. O el riesgo de distanciamiento forzoso tras el confinamiento anticipado por Faro / Da Col en Diari de Tarragona. 

Más enjundia tiene otra tira de estos últimos que recoge la interpretación de esta pandemia a partir de la hipótesis Gaia que viene circulando por las redes hace ya algún tiempo. Y notable lo bien que aguantan las viñetas lemas como el que complementa esta. Lo malo es que luego levantas la cabeza  del periódico y viene Dª Realidad a preguntar qué hay de lo suyo.

Peridis retomó el Viernes Santo su colaboración con El País con una viñeta dedicada a la situación del Reino Unido. Un dibujo que nos lleva a recordar el guante blanco con que  el humor británico ha tratado el contagio de su primer ministro. Por ello tenemos que recurrir al austriaco Marian Kamensky para recordar que hay algo de justicia poética en que hay sido víctima de su grotesco enfoque inicial que ha llevado a su país a lo que hay quien considera con permiso de España, el infierno europeo.

Mucho más dura resulta la viñeta de Bill Bramhall sobre la conducta de Trump que podría salvar la vida del lector, pero hay que reconocer que la atrevida ignorancia (un sonrojante ejemplo) que está exhibiendo el presidente de Estados Unidos, convertido en cheerleader por Ann Telnaes, hace entendible tanta irritación.

 

En esta que es temporada de conejos en la iconografía pascual sajona de origen germánico, Milt Priggee tiró del socorrido meme del conejito de Duracell (allí de Energizer). Y da para peguntarse ¿por qué la sociedades con mayor acceso a la información de la historia está en manos de semejantes disfuncionales personajes? ¿Más Gaia? 

El caso es que mañana se reactivan algunos sectores económicos y no faltarán las polémicas con las mascarillas. Esas que hace pocas semanas no tenía sentido usar y que, ahora, en parte seguramente no vayan a ejercer sino de meros placebos. El modelo "Alla tú", en palabras de Esteban.

51 han sido las viñetas de hoy, aportadas por el talento de 22 firmas nacionales y 16 foráneas. 

Que tengan suerte ahí fuera.