Esta semana comenzamos con Lola Pons, que trató sobre El doblaje de las lenguas en su sección de los martes en la Cadena Ser. Y un tanto intrigados dejó a los oyentes con su referencia, ayuna de adicionales detalles, de que fue en 1931 cuando se dobló la primera película al español. Así que nos parece oportuno añadir que el primer doblaje al español [hablado en España; enseguida veremos la importancia de este matiz] proyectado en los cines de nuestro país pasa por ser el del film “Desamparado” (Derelict, 1930) protagonizado por George Bancroft. Un film estrenado en el cine Coliseum de Barcelona el 15 de junio de 1931, que no permaneció mucho tiempo en cartel.
Volvemos al podcast de Dª Lola para apuntar que el poema 'Verano' de Rafael Alberti, que forma parte de la colección 'Marinero en tierra', fue el escogido para poner el habitual poético final de la radiofónicas colaboraciones de la catedrática sevillana.
Pasamos al Cervantes Virtual donde José Joaquín Martínez Egido trató en el Martes Neológico sobre erte. Una voz creada por siglación, es decir, a partir de las iniciales de otras, en este caso de expediente de regulación temporal de empleo. Tecnicismo económico que la brutal crisis causada por la covid-19 ha llevado, malhereusement, al lenguaje general.
¡Y dale con los juegos de palabras y otras lindezas! es el título del Trujamán en que Íñigo Sánchez Paño analiza algunos ejercicios de contrepèterie (‘permutación de sonidos, letras o sílabas en un enunciado para obtener otro enunciado con sentido cómico y a menudo obsceno’) que tanto propicia el francés. Y no falta entre los citados uno de los más famosos de ese idioma, que es el incluido por Rabelais en el capítulo «Sobre las costumbres y condiciones de Panurgo» de Pantagruel: femme folle à la messe & femme molle à la fesse (mujer loca en misa y mujer blanda de nalgas) .
Oportuno momento, nos parece, para recordar una traductoria nota sobre una viñeta de Pinto & Chinto ya incluida en Humor de cine y tv de marzo 2021 (2ª parte). El brillante recurso a “multiplícate por cero” que María José Aguirre de Cárcer ideó para traducir al español el original “eat my shorts”, literalmente ‘cómete mis calzones’, que Bart Simpson utiliza cuando alguien le produce contrariedad. Una expresión del inglés que alguien con menos ingenio seguramente habría traducido como ‘¡desaparece!’
Proseguimos con Álex Grijelmo, que se soprende en el artículo Mi persona de que se critique el habitual uso que hace Pedro Sánchez de esa fórmula concebida para todo lo contrario. Invitamos al lingüista periodista a reescribir su artículo aplicado a otra de las locuciones que cita, por ejemplo servidor, para que valide que su indiscutible conclusión entra en contradicción, a fuer de obviar el efecto del patente anacronismo, con la tesis que defiende. Un proceso análogo al sufrido por ciertos tratamientos de respeto que precisamente trató Lola Pons hace pocas semanas en Don y Doña, Señor y Señora.
Pasamos a Fundéu. Una institución que el lunes aclaró que siévert, con tilde, es la adaptación al español del nombre de la unidad con la que se mide la radiación absorbida por la materia viva (cabe añadir que corregida por una valoración del daño biológico; un ajuste que la diferencia del también mencionado gray).
Y tampoco costaba tanto incluir una breve nota aclaratoria de que ese nombre es un homenaje a Rolf Sievert (1896-1966), un físico médico sueco que destacó por sus pioneras investigaciones sobre los efectos biológicos de la radiación.
El siguiente apunte es un recordatorio de que la escritura recomendable del acrónimo de Mercado Común del Sur es Mercosur, solo con la inicial mayúscula.
Sorprendente nos pareció la elección del miércoles, unas claves de redacción sobre el ébola suscitadas por un nuevo brote que no se especifica. El caso es que la última alerta de la OMS sobre esa enfermedad, fechada el 17 de febrero, hace referencia a Guinea Ecuatorial, pero hay una larga serie anterior sobre la República Democrática del Congo. Pero ambas con escasísimo eco en la prensa de marzo.
El jueves dieron por válida la expresión casa pasiva, traducción del término alemán Passivhaus, para denominar un tipo de vivienda sostenible cuya construcción está basada en un estándar de eficiencia energética. Llamativo el recurso a un concepto con habitual connotación negativa.
Y ayer los urgentes completaron un nuevo ciclo semanal con un recordatorio de que vacunar es un verbo transitivo con la persona que recibe la vacuna como complemento directo, por lo que lo adecuado es emplear los pronombres lo y la, aunque el uso de le para el masculino singular es un tipo de leísmo admitido.
P.S.- Enlace a la 2ª parte
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