La primera tapa de 2020 del semanario The New Yorker lució una magnífica ilustración de Pascal Campion, ya reseñada en El revistero de diciembre (4ª parte), donde pueden verse las dos portadas previas del artista francés. “Twilight Avenue” es el título de esta tercera.
La siguiente fue una creación de Bruce McCall titulada “A Brush With Greatness” en la que el ilustrador canadiense hace una irónica contraposición de las acepciones que damos a pintura y pintor.
El pequeño tamaño del retrato obsevado dificulta apreciar que se trata de una copia, de tamaño bastante menor que el original conservado en el Museo del Louvre, del 'Retrato de Baltasar Castiglione' pintado hacia 1515 por Rafael Sanzio. Un bonito homenaje al gran artista italiano para iniciar el año en que se conmemora el 500º aniversario de su muerte.
Y la cuarta portada del mes fue “Mindful Commuting”, una creación de la barcelonesa Luci Gutiérrez que se apuntaba con la misma su tercera cubierta neoyorquina. Debajo mostramos las dos anteriores, aprovechando para recordar que la segunda es objeto de un pormenorizado análisis en el apunte Manhattan por Luci Gutiérrez.
Procede añadir que ayer, conforme al calendario habitual de la revista neoyorquina, se presentó la tapa fechada el próximo lunes. Una creación de Christoph Niemann titulada “Whiteout” que cuenta con la vistosa versión animada que puede verse junto a estas líneas. Y en este enlace encontrarán el tuit del autor con el proceso creativo.
El autor, @abstractsunday en Instagram, es un artista nacido en Alemania en 1979 que se trasladó a Nueva York en 1997. Y si no nos fallan las cuentas, esta es su 31ª portada para TNY desde que se estrenara en julio de 2001.
El concepto nos ha recordado uno de los bocetos que barajó para la del 6 de octubre de 2014, que presentamos emparejada con la sutilmente animada elección final. Comentaba en aquella ocasión el artista que cuando llegó por primera vez a la gran manzana estaba lloviendo y que ese recuerdo seguramente ha influido en que considere que no hay lugar más hermoso para quedarse atascado un día de lluvia. Pues ahora se ha dejado de atascos para trasladar el concepto a pedalear bajo una nevada. Y para hacerlo por el icónico protagonista del apunte El puente de Brooklyn en The New Yorker (más las cosas de un bromista escultor).
Añadimos, ya para finalizar, un enlace a la colección a la colección de portadas de Niemann, que complementamos con las más recientes, que no están incluidas en la misma.
P.S.- Resulta llamativo que TNY apenas haya llevado a una portada, la fechada el 35 de marzo de 2015, una de las líneas creativas más interesante de Niemann, que es construir una escena a partir de un objeto. Adjuntamos algunos ejemplo que nos gustan particularmente. Y no se pierdan el ciclista de este enlace.
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