El Grinch creado por Dr. Seuss en 1957 es el primer personaje típicamente navideño que hemos encontrado este año en una pieza humorística. En concreto en un dibujo de Steve Breen publicado a principios de noviembre en San Diego Union Tribune con una oportuna versión pixelada que apuntaba al atasco de la logística mundial como máximo candidato a robar las venideras fiestas. Y lo que es en España tan solo llevamos vista, de momento, una versión del dúo bilbaíno Antón portadora de la factura de la iluminación navideña.
No es raro que la primera referencia a las estacionales luces fuera la de Davila en Faro de Vigo del 22 noviembre. Una tira que daba cuenta de la inauguración dos días antes del anual capricho de Abel Caballero que tantas críticas obliga a reprimir al espurio ecologismo del según y quién.
El dibujante conocido como O Bichero volvía ayer sobre el asunto, dando así continuidad a otras referencias a la iluminación de Vigo ya comentadas en el apunte del domingo: la de Asier y Javier en Deia y la de Santy Gutiérrez en La Opinión de A Coruña, ambas publicadas el día de la Constitución.
Volvemos a la literatura con los espectros del 'Cuento de Navidad' (A Christmas Carol. In Prose. Being a Ghost Story of Christmas, 1843) de Charles Dickens. Boris Johnson interpretó al del futuro y el pasado, respectivamente, en las viñetas de Patrick Blower (Telegraph) y Dave Brown (The Independent), mientras que el norteamericano Matt Davies convertía al coronavirus en los tres fantasmas que visitan a Scrooge. Inquietante ese 2022. [1]
La pandémica lectura del relato de Dickens parece destinada a convertirse en uno de los grandes éxitos del humor de estas Navidades. Algunos ejemplos posteriores son las adjuntas viñetas del irlandés Graeme Keyes (Irish Daily Mail) y el canadiense Brian Gable (The Globe and Mail).
Manel Fontdevila convirtió a Pedro Sánchez en el primer caganer de la temporada (Ara 5/12), mientras que Eneko aportó un nacimiento-ola, Asier y Javier sometían al suyo a la disciplina del pasaporte covid y Napi especuló con un posible motivo bancario motivo en esa obligada recalada en un ganadero portal.
Proseguimos con la visión de Javi Salado sobre las cenas de empresa y la doble de Sansón sobre la lotería. Unas piezas que denotan más bien escaso aprecio por ese recaudatorio evento de la Hacienda Pública.
Retrocedemos al domingo 5 para recordar el Santa Claus de Miki y Duarte enfrentado a la LOMLOE. Y asimismo vamos a recuperar una tira de Davila del año 2010 que es toda una invitación al optimismo, porque, aunque tardara más de una década, ese niño gallego por fin consiguió su tren. Otros niños, como el de Matt Davies, mejor será que no vean cumplidos sus deseos.
El pasado jueves detectábamos una involuntaria conexión humorística en la que Napi ejercía de aguafiestas de las "chantajistas" ilusiones del niño de la viñeta de Ricardo Martínez. Y al día siguiente el asturiano Mortiner también convertía a Papa Noel en agente vacunador.
Menos niño es el que escribe su carta a los "Reyes de Occidente" en la tira de JL Martín del pasado viernes. Un dibujante que asimismo llevó a su sección de La Vanguardia una oportuna reflexión sobre el desigual impacto de esos problemas logísticos con los que comenzábamos. Y Morten Morland apunta hoy en The Times que en su país tiene un Santa bocazas que lo promete todo (¡esa cara de la madre!). Pero ojo, británicos niños, que es un mentiroso compulsivo que nunca cumple nada.
La visión de los reyes publicada por Eneko en Público reincide en una idea que ya vimos el año pasado a Santy Gutiérrez en una viñeta recopilada en el apunte Humor de Reyes. Miki y Duarte llevaban a su tira de ayer la poco conocida utilidad de la mirra, una resina cuyo simbolismo deriva de su uso para embalsamar a los muertos. David Parkins completa el bloque con una visión de las consecuencias de la proliferación de satélites.
Leemos que la diseñadora ha querido mantener el anonimato. Pues hace muy requetemal, porque ese trabajo le garantiza un seguro contrato del ayuntamiento de Barcelona para próximas Navidades. 
No hay comentarios:
Publicar un comentario