Ayer ya comentamos que el pasado viernes falleció a los 87 años el ilustrador canadiense, largamente afincado en Nueva York, Bruce McCall. Y hoy nos proponemos ampliar la panorámica sobre su contribución a las portadas de la revista The New Yorker que iniciamos en el apunte precedente con un comentario de las tituladas “A Brush With Greatness” (13/1/2020) y “Boxing Rink” (7/2/2022).
Pasamos a dar cuenta del primer encargo que recibió de la revista cuando la dirección de arte estaba a cargo de Tina Brown, que fue hacer una desenfadada referencia al accidente sin vítimas sufrido el 4 de julio de 1993 por un dirigible publicitario de la cadena Pizza Hut que, tras perder gas por un desgarro, acabó por estrellarse contra un edificio residencial del 410W de la calle 53 de Manhattan. La creatividad que el artista alumbró a las cuatro de la madrugada, según su propia confesión, tras horas de darle vueltas al asunto, es la que puede verse junto a estas líneas: un concurrido aparcamiento específicamente dedicado a ese tipo de aeronaves que se publicó en la portada fechada el 16/8/1993 (recuérdese la práctica habitual en Estados Unidos de fechar la "caducidad" en los estantes de los quioscos). La complementamos con un enlace a un vídeo del percance, otro adicional de la intervención de los bomberos, y unas fotografías del antes y el después del accidentado "blimp". 
La segunda pieza que hemos elegido hoy seguramente es la más inquietante de cuantas McCall llevó a la tapa de la revista neoyorquina. Una pieza fechada el 4/8/1997 que complementamos con una imagen detallada de la pecera que permite apreciar mejor la crudeza de la propuesta de cambio de paradigma depredatorio (cuando vemos esta ilustración no podemos evitar recordar la costumbre, ya casi desaparecida, que había en Asturias de llamar "hombrinos" a los bocartes). Años más tarde McCall volvería sobre el concepto del cambio de papeles en la portada del 27/2/2012 dedicada a los Óscars, pero con una versión mucho menos impactante.
Proseguimos con la tapa del 8/5/2000 inspirada en una imagen de la fotoperiodista Margaret Bourke-White encaramada a una de las águilas decorativas de la planta 61ª del edificio Chrysler que fue tomada en 1934 por su asistente Oscar Graubner. Pero el propio artista no dudó en reconocer que la foto distaba de sertan conocida como el creía y le causó la frustración de resultar masivamente incomprendida.
"The Ascent of Man" (14/5/2007) es una versión de la secuencia evolutiva habitualmente conocida como 'La marcha del Progreso' (The March of Progress) que fue publicada como curiosa portada triple que no es desplegable, sino que consta de tres piezas consecutivas, todas ellas rotuladas con la cabecera, presentadas con un corte lateral escalonado que permite intuir la presencia de una continuación.
La que sí reponde a un formato desplegable tradicional es la también triple “The World Tomorrow” (18/5/2015).
En el enlace anterior encontrarán 27 imágenes detalladas de ese recorrido que va desde el descubrimiento del fuego al de la energía nuclear. Leonardo da Vinci, Galileo, Franklin, Ferdinand von Zeppelin, Edison, Graham Bell, Marie Curie, Einstein y hasta Bob Dylan son los personajes más destacados presentes en esa variopinta recopilación que incluye desde un hula-hop o un Macintosh a la famosa luna de George Méliès.
Concluimos con la colección de 81 portadas de Bruce McCall que tenemos identificadas en The New Yorker (la revista le atribuye 83, pero nos permitimos poner en duda que esa cuenta sea correcta).
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